Las bancadas de los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) exigirán en la sesión de este martes que se llame a cuentas a la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Claudia Ruiz Massieu, para que explique las gestiones que realizaron, tanto la embajada de México en España y otras autoridades para defender y asesorar al ex dirigente nacional priísta Humberto Moreira, detenido y acusado en ese país de lavado de dinero.

Panistas y perredistas consideraron, en entrevistas por separado, que la investigación que reveló el periódico El País en España, demuestra la ayudadota que el gobierno de Enrique Peña Nieto dio al ex dirigente nacional priísta, que impulsó y financió su campaña a la presidencia de la República, y evidenció que hubo intervención directa del gobierno, incluso de la Procuraduría General de la República. Es una vergüenza, dijeron

En su edición de ayer, El País publicó en España una investigación periodística titulada Misión: salvar en Madrid a Humberto Moreira, en la cual dio cuenta de que el gobierno de Enrique Peña Nieto puso a disposición del ex dirigente nacional priísta, Humberto Moreira toda la maquinaria diplomática y legal de su embajada en España para sacarlo de la cárcel y ayudar a su familia.

La investigación señala que incluso la procuradora general de la República, Arely Gómez González, telefoneó a su homóloga Consuelo Madrigal, fiscal general del Estado para saber del caso y conocer la posición de los fiscales españoles.

Abunda el texto periodístico que el mismo día de la detención funcionarios de la embajada recibieron órdenes de volcarse con el caso: unos en la búsqueda de prestigiosos abogados españoles que se hicieran cargo de su defensa, otros en atención a la esposa de Moreira, Vanessa Guerrero, y de sus dos hijas, incluso fueron hospedadas en un hotel que mantiene convenio con la embajada mexicana.

La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, la senadora panista Gabriela Cuevas, acusó: la canciller tiene que explicar quién dio las instrucciones, de qué nivel procedieron las órdenes y qué recursos se comprometieron para que la embajada mexicana en ese país se volcara a defender al priísta Moreira.

Cuevas sostuvo que “esto es una ayudadota que se le dio al ex dirigente nacional priísta que no vemos que se haga por los 2 millones de mexicanos deportados de Estados Unidos y mucho menos por aquellos nacionales condenados a muerte en ese país. Tampoco lo vemos en un seguimiento, como el reciente caso de los mexicanos que fueron asesinados en Egipto.

Vemos una serie de casos que requieren la protección del Estado mexicano de manera muy importante, por ejemplo, en el caso de los migrantes, cuya única falta es ir a buscar las oportunidades que no tienen en México, y ahí no está la mano del Estado mexicano. Ahí no está la mano de los abogados caros ni de los choferes para recoger a las familias. Aquí se ve el mismo Partido Revolucionario Institucional (PRI) de siempre, que apuesta a defender a sus cuates con recursos públicos como si fueran privados. En México no se investiga a Moreira y por lo visto se obstaculiza cualquier otra investigación, se apuesta al influyentismo y ahora se busca internacionalizar la impunidad.

En tanto, el senador Alejandro Encinas también destacó que el PRD impulsará que el tema sea llevado a tribuna. Es una vergüenza que las instituciones del servicio exterior, que por lo general no atienden los problemas que viven muchos mexicanos fuera del país, ahora actúen de oficio para convertir este asunto, la comisión de un delito, en un tema diplomático entre dos países.

Encinas refirió que la revelación que hizo El País, es inaceptable, como lo es la intervención de la PGR. Esto no es sino una evidencia más de que en el juicio que se le siguió a Moreira en España hubo la intervención directa del gobierno de Enrique Peña Nieto. De que hubo un acuerdo para cerrar el caso y ocultar toda la información que acredita el delito de lavado de dinero, porque Moreira financió la campaña de Peña Nieto, porque creó el sindicato de gobernadores que impulsaron a Peña Nieto a la presidencia de la República.

A su vez, el presidente de la Comisión de Justicia, el panista Fernando Yunes, sostuvo: “todo indica que la embajada estuvo a la orden y fue prácticamente la defensa legal de Moreira en España, esto es absolutamente reprobable. Se le defendió por su relación con Peña Nieto, ya que fue quien lo impulsó a la candidatura presidencial priísta desde a dirigencia del tricolor”.