El recorte presupuestal que afectará a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ascenderá a 12 mil 254 millones de pesos, informó el titular de dicha dependencia, Gerardo Ruiz Esparza. De esa cantidad de recursos del gasto corriente se tomarán mil 300 millones.

Tras reunirse con las fracciones del PRI y del Partido Verde en la Cámara de Diputados el funcionario refirió que la SCT buscará que el recorte al gasto durante el presente ejercicio no repercuta, ni económica ni socialmente, y mucho menos tenga efectos en la cancelación de obras. En torno al proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, éste no se verá afectado pues es autofinanciable.

En la reunión celebrada en el Auditorio del Edificio E del Palacio Legislativo, el político mexiquense respondió a las múltiples interrogantes que se le formularon del lado de los diputados de su partido, en torno al desarrollo de las obras y proyectos comprometidos en sus respectivos estados.

Al tratar el asunto del gasto corriente, el secretario adelantó que a reserva de realizar un análisis, el recorte en este rubro alcanzará mil 300 millones, que equivale a 15 por ciento del total, y que se verá reflejado en la reducción de viáticos, servicios de telefonía, fusión de plazas de trabajo. No obstante mil 400 plazas por honorarios se verán afectadas.

A pesar de las crecientes dudas de los diputados sobre el desarrollo de las obras en sus entidades, el funcionario trató de convencerlos de que éstas (las obras) continuarán su proceso de construcción, no hay nada de qué preocuparse, dijo.

También, al tocar el empleo temporal, con una inversión de 2 mil millones de pesos durante el presente año se crearán 380 mil plazas de trabajo.

En el encuentro, Ruiz Esparza también informó que a lo largo del país se construyen 80 carreteras, de las que se espera entregar al concluirse el presente ejercicio 70 de ellas.

Posteriormente, en conferencia de prensa, dio a conocer que la SCT busca encontrar asociaciones públicoprivadas (APP), para sacar adelante proyectos como el acortamiento ferroviario entre Aguascalientes y Guadalajara, el libramiento de Celaya o el túnel de Manzanillo.

Pidió comprensión a los legisladores, porque a veces el reclamo a la Secretaría de Hacienda es que no se hace alguna obra que está en un momento dado en un programa, pero esa obra necesita tener recursos financieros ya sea por la vía presupuestal o por otra vía.

Al detallar sobre la situación en la que se encuentra el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (en construcción) reiteró que afortunadamente esa obra es autofinanciable, pues tiene sus propios recursos para realizarse. No habrá efectos sobre el aeropuerto, ni sobre el tren México-Toluca, ni sobre el tren de Guadalajara.

También se le insistió sobre el número de plazas de trabajo que serán afectadas: estamos hablando de alrededor de mil 400 plazas que se están cancelando, algunas de ellas son por honorarios, algunas de ellas no se están ocupando. Tendremos que hablar con el personal para que pueda tener una salida lo más decorosa posible y tenemos que tomar estas determinaciones en los próximos días.