El Comité de Familiares de Personas Detenidas Desaparecidas en México (Cofaddem) Alzando voces sostuvo que no hay voluntad política para combatir ni erradicar la desaparición forzada en el país.

Cristina Paredes, integrante de la organización, señaló que tampoco hay reconocimiento de que el fenómeno, ya sea por motivos políticos o sociales, obedece a una política de Estado.

Afirmó que es muy evidente la colusión del crimen organizado con instancias de gobierno.

En entrevista telefónica, agregó que junto con otras organizaciones, nacionales y de Michoacán –donde se ubica Cofaddem–, han impulsado la creación de mecanismos que protejan a todas las personas de sufrir desaparición forzada, sin que hayan recibido respuesta oficial.

Resaltó que en Michoacán el crimen organizado está dentro de las estructuras gubernamentales. Quienes han llevado a cabo la mayoría de desapariciones han sido integrantes del Ejército, de la policía. Y entre estos últimos ha habido agentes que han entregado personas al crimen organizado.

Agregó que, por lo general, en las zonas de alto nivel económico se genera más violencia en contubernio con esos delincuentes.

Para combatir la desaparición forzada, continuó la activista, el Estado debe reconocer que es el primer generador de violencia; el Estado es el mayor implicado en las miles de desapariciones, ya sea por motivos políticos o sociales. Así que el único responsable es él, que utiliza diversos actores para llevar a cabo estas prácticas.

Paredes destacó que la iniciativa de ley sobre desaparición forzada del presidente Enrique Peña Nieto ni siquiera se acerca al objetivo de las miles de familias que nos encontramos en esta situación: verdad, justicia y garantía de no repetición de este crimen de lesa humanidad. No hay voluntad para reconocer la situación tan grave que se vive en el país, subrayó.

Mencionó que en Michoacán hay organizaciones que aseguran tener registro de más de 3 mil desaparecidos de 2007 a la fecha en la entidad, aunque la Cofaddem sólo tiene documentados 293 casos.