Joaquín El Chapo Guzmán Loera pasa lista cada hora durante el día y cada dos durante las noches. En una diligencia actuarial, el líder del cártel de Sinaloa dijo al representante del juzgado décimo de distrito en materia de amparo, con sede en la ciudad de México, que las autoridades penitenciarias casi no lo dejan dormir, y que fuera de su celda hay un perro que ladra mucho.

De acuerdo con el informe actuarial elaborado el 16 de enero a las 20:20 horas, Héctor Carlos López Fuentes acudió al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, Altiplano, para conocer la situación en la que se encuentra Guzmán Loera, particularmente para certificar si el capo se encuentra en condiciones de incomunicación.

En ese contexto, durante la diligencia tuvo a la vista a Guzmán Loera, quien aceptó que el abogado José Luis González Meza promovió en su nombre un amparo para evitar la incomunicación.

Durante la diligencia, el actuario certificó si Guzmán Loera era objeto de incomunicación o si había tenido comunicación con sus familiares y abogados, y como resultado asentó en escrito: Manifestándome que desde el día que le notificaron lo de la extradición no ha visto a su abogado; y a su familia desde días antes de ser detenido.

Imposibilidad material

El funcionario judicial señaló que no pudo entablar comunicación con los abogados o familiares de Guzmán Loera, toda vez que no se encontraban presentes en el Cefereso, y por motivos de imposibilidad material, ya que no hay teléfonos en las salas y no se puede hacer llamada alguna.

Guzmán Loera asentó en el acta judicial: Manifiesto que del día de ayer a la fecha 16 de enero no he podido dormir, ya que me levantan a pasar lista en el día cada hora y en la noche cada dos horas y hay un perro al lado que ladra mucho y también me espanta el sueño.

El líder del cártel de Sinaloa fue reaprehendido el pasado 8 de enero en Sinaloa, casi seis meses después de fugarse del Altiplano. Desde entonces se han dispuesto medidas de seguridad y vigilancia para evitar que sea envenenado, que se quiera suicidar o que pretenda fugarse de nuevo.