Integrantes del Foro de Periodistas del Estado de Morelos denunciaron la actitud negligente y prácticas simuladoras del gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu en el mecanismo de protección a comunicadores.

Señalaron que en el contexto de la grave crisis social y política que vive el estado de Morelos, así como la fuerte presencia del crimen organizado, de 2012 a la fecha el mecanismo se ha activado en 23 ocasiones ante diversas agresiones contra periodistas, 10 de ellas en 2015.

Afirmaron que se tienen datos de 30 agresiones más, pero los afectados no han presentado denuncia porque desconfían de las autoridades estatales.

Actualmente 16 casos siguen activos por amenazas y agresiones de funcionarios y ex funcionarios públicos, como diputados, presidentes municipales, secretarios y directivos de diversas dependencias.

Ante el desinterés e incumplimiento de las medidas de protección por el gobierno estatal, dicho mecanismo prácticamente ha fracasado.

En conferencia de prensa efectuada en la ciudad de México, los periodistas Claudia Marino, Antonio Rivera, Estrella Pedroza y Jesús Castillo presentaron una larga lista de compromisos incumplidos por el gobierno de Graco Ramírez, que en diciembre pasado los obligó a levantarse de la mesa del comité técnico del mecanismo, y exigir una sesión extraordinaria que cumpliera con las condiciones mínimas para trabajar, cosa que no ha ocurrido.

Esta decisión, explicaron, se dio luego de más de un año de constantes ausencias de los funcionarios responsables, incumplimiento de acuerdos y evidente falta de interés, donde incluso fueron extraviados expedientes de las denuncias.

Responsabilizaron al gobernador Graco Ramírez y al comisionado estatal de Seguridad Pública, Alberto Capella, de cualquier agresión o daño a su integridad física que puedan recibir tanto los periodistas que tienen activado el mecanismo como los integrantes del foro.

De acuerdo con los integrantes del Foro de Periodistas, el año pasado hubo un incremento considerable de agresiones contra comunicadores y las presiones contra los medios de comunicación aumentaron desde que Graco Ramírez impuso el llamado mando único policiaco en varios municipios de la entidad.

Además, de manera paralela, dijeron, también están creciendo las denuncias por violaciones a los derechos humanos.