La Red Mexicana de Afectados por la Minería (Rema) responsabilizó al gobierno federal y al de Sonora por la posible destrucción del territorio de los indígenas comcáac (seris).

En un comunicado, la organización señaló que las autoridades han guardado silencio pese al riesgo que corren las comunidades de Punta Chueca y Desemboque por el proyecto Tiburón, Agua y Energía, que considera la desalinización, producción de energía mediante mareas y la instalación de granjas acuícolas, y en la isla Tiburón el desarrollo de un proyecto minero y otro turístico.

Añadió que estos proyectos se impulsan sin que se lleve a cabo una consulta libre, previa e informada entre los indígenas, y denunció que las empresas están dividiendo a la comunidad.

Desmintió que Tiburón, Agua y Energía tenga un enfoque ecológico y apegado a la cosmovisión de la comunidad comcáac. Por el contrario, lo que presentan es una falsa solución. Cualquier megaproyecto que tenga la extracción de bienes naturales como principal sustento pone en riesgo el territorio donde se piensa instalar. En el caso de los pueblos originarios, el riesgo aumenta, ya que también se pierde el patrimonio cultural milenario.

Expuso que ni en la Secretaría de Economía ni en la de Medio Ambiente y Recursos Naturales hay información en torno al proyecto minero, ubicado en la sierra La Peineta, aproximadamente 171 kilómetros al noroeste de Hermosillo, entorno natural del borrego cimarrón y del venado bura, especies en protección especial, ni tampoco del proyecto de generación de energía.