Barcelona.

Con vistas a las exigencias del futuro, el Barcelona presentó el modelo de su futbol formativo, proyecto estimado para 2016-2021, que pretende ser evolutivo para adaptarse a los cambios.

El lunes Messi conquistó su quinto Balón de Oro. Es un premio merecido. Tenemos que ir más allá para entender el futbol y la formación de La Masía, manifestó Josep María Bartomeu, presidente azulgrana, en la presentación del proyecto en Sant Joan Despí, donde se forman jóvenes que buscan jugar en el primer equipo.

Para el representante del club catalán, el modelo formativo de la entidad debe continuar siendo una casa de sueños que se hagan realidad, dijo el dirigente, apoyado en la presentación por el director de deportes profesionales, Albert Soler, y los secretarios técnicos del futbol formativo profesional y aficionado, Josep Segura y Jordi Roura, respectivamente.

El nuevo modelo de futbol formativo se inscribe en el Plan Estratégico aprobado por la junta directiva, basado en el cumplimiento de cinco líneas: excelencia deportiva, máxima implicación social, desarrollo de infraestructuras deportivas, marca y su posicionamiento global y gestión y sostenibilidad económica.

Los principales hitos de los deportes profesionales del club son: obtener los mejores resultados posibles; atraer y contar con el mejor talento; apostar por un estilo propio de juego en las diferentes disciplinas; disponer del máximo número de jugadores formados en el club; ser el equipo referente en el ámbito nacional e internacional en el área femenina; ser el principal elemento de proyección de la imagen de la escuadra y mantener los criterios económicos de la misma.

Barcelona viene de cumplir una sanción de la FIFA que le impidió realizar fichajes en 2015, como castigo por faltar a la norma de contratar a jugadores menores de edad extracomunitarios.

Debido a eso, el club estableció un organigrama diferenciado entre el futbol formativo profesional con los jugadores de la filial y los juveniles, y el aficionado, que engloba a los jóvenes talentos.

Las reglas de juego han cambiado y tenemos que adaptarnos. Lo que varía es la visión geográfica que tendremos, dijo Roura, cuyo objetivo principal al frente del área amateur será encontrar los mejores elementos del futbol catalán en las categorías siete y españoles cuando se inicie la etapa del balompié 11.

Segura, responsable de los equipos juveniles y del Barcelona B, enfrentó en las recientes semanas la situación de la filial, en la que se produjeron bajas –hasta seis– y las incorporaciones en este mercado de invierno tras cumplir la sanción de la FIFA.

Otra novedad es el proyecto Masía 360 grados, enfocado en el desarrollo humano, educativo y deportivo de los jugadores profesionales, para que los elementos que pasen por el club aseguren su futuro profesional cuando ya no formen parte del mismo.