Aunque las autoridades repiten que el país no es inmune al comportamiento de la economía global, ya no se debe ni puede seguir mencionando que la debilidad económica es originada por la actividad en Estados Unidos. Lo que se requiere son acciones firmes en materia económica y una política industrial y de fomento dinámica y flexible, afirmó la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).

El presidente de la comisión de fomento industrial del organismo, Juan Manuel Chaparro Romero, expresó que, debido a la falta de una estrategia integral en materia industrial, México se encuentra enfrascado en niveles de crecimiento del producto interno bruto (PIB) inerciales, los cuales nunca llegan al 5 o 7 por ciento ofrecidos durante las campañas electorales.

El dirigente recordó que en 2013 la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) pronosticó un crecimiento de 3.5 por ciento y se finalizó en 1.4, mientras en 2014 el vaticinio fue de 3.9 y apenas se logró 2.1.

Para el año pasado el PIB estimado inicial por la SHCP fue de entre 3.2 y 4.2 por ciento, pero ahora se dice que será de entre 2 y 2.8.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe consideraba que México crecería 2.5 por ciento en 2015 y recientemente modificó su previsión a 2.2, mientras el Fondo Monetario Internacional (FMI) también ajustó a la baja su vaticinio al ubicarlo en 2.2.

El propio Banco de México redujo su proyección a 2.45 por ciento, y previamente estimaba tres.

Con todos estos antecedentes parece que el país se ha enfrascado en rangos de crecimientos inerciales del PIB que no contemplan los desarrollos ofrecidos durante las campañas electorales de nuestros políticos, criticó.