Organizaciones de migrantes mexicanos criticaron duramente la actitud pasiva y hasta cómplice que ha asumido el gobierno de México ante la política de redadas y deportaciones masivas aplicada por el gobierno del presidente Barack Obama, que ha provocado más de 3 millones de retornos obligados de connacionales durante su gobierno.

Además, alertaron que esta política se fortalecerá durante el presente año, debido a las elecciones presidenciales en Estados Unidos, al usarse la migración como un tema electoral en el que los diferentes candidatos buscarán primero sus intereses políticos antes que una reforma migratoria.

En conferencia de prensa, representantes de la Organización Binacional Aztlán Chicago-México, la Alianza por los Derechos de los Inmigrantes, del Movimiento Binacional por la Esperanza, el Club Migrante Tonatico; y la Coalición Binacional contra Donald Trump denunciaron que durante los meses recientes, dado el clima electoral, aumentaron las manifestaciones de odio y xenofobia en Estados Unidos.

En un pronunciamiento conjunto, estas organizaciones salieron en defensa de los derechos humanos de la población migrante, que desde hace tiempo se han visto violados por las redadas y deportaciones, que se realizan sin importar el dolor de la separación de millones de familias y el riesgo que corren quienes son obligados a regresar a sus tierras, pues muchos de ellos han huido de la violencia y del hambre.

Los migrantes María García Erick Castillo y Juventino Montiel informaron también que este jueves, en la ciudad de Chicago, Illinois, integrantes de la Alianza por los Derechos Humanos de los Migrantes realizarán una protesta contra las redadas que a escala nacional en Estados Unidos ha iniciado el Departamento de Seguridad Nacional, a través de los agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas.

Los miembros de la alianza se manifestarán frente a las oficinas de inmigración en Chicago para demandar que las autoridades brinden una explicación sobre los motivos que tienen para realizar esta escalada de terror contra la comunidad migrante en Estados Unidos.

Señalaron que estas redadas significan un abuso de poder del gobierno del presidente Obama, que ha deportado a más de 3 millones de personas y que quiere continuar con esa política de abuso contra la comunidad migrante.

La impresión que da la administración de Obama es que está dando una concesión al discurso xenofóbico del candidato republicano Donald Trump, que muestra odio y desprecio contra los migrantes mexicanos, centroamericanos y musulmanes, señalaron.