En el país vecino no hay condiciones para aprobarlo aún, expone
Jueves 7 de enero de 2016, p. 26
El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, se pronunció ayer porque el Acuerdo Estratégico Transpacífico de Cooperación Económica (ATP) no se envíe de inmediato al Senado para su ratificación, con el fin de saber qué sucede con el documento en Estados Unidos, donde se prevé que no hay condiciones para aprobarlo, sino hasta después de las elecciones presidenciales.
Por otra parte dijo que se han tomado las medidas necesarias para reducir el impacto de la volatilidad de los mercados financieros, y la expectativa de los analistas es que el peso siga en la banda en la que se ha movido. Resaltó que ayer llegó a un límite superior, pero descartó alguna sorpresa adicional.
Al participar en la vigesimoseptima Reunión de Embajadores y Cónsules de México en el Extranjero, el funcionario defendió la participación del país en las negociaciones del ATP.
Frente a los diplomáticos reunidos en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), recordó que el 5 de octubre concluyeron las negociaciones del acuerdo y que el 4 de febrero próximo se suscribirá. Tras la firma, se iniciará el proceso de ratificación en los Estados involucrados.
En México se puede enviar al Senado a partir de febrero, mientras que en Estados Unidos se abre la ventana en el próximo periodo de sesiones y es ahí donde la administración Obama ha dicho que realizará un esfuerzo para procesarlo, añadió.
Sin embargo, expuso que legisladores del vecino país han dicho que no ven condiciones de que esto ocurra en breve. Pero después de la elección presidencial de noviembre, se puede procesar.
Guajardo explicó que en una reunión del gabinete económico propuso que el documento no se mande de inmediato al Senado para su ratificación y se vaya viendo el avance del proceso legislativo en la unión americana.
Precipitarnos en un proceso de aprobación antes de ver el final de la película en la elección presidencial de Estados Unidos sería muy desgastante en el proceso político y de aprobación mexicano
, agregó.
Si bien dijo que el gobierno está listo para mandarlo al Senadopartir del 4 de febrero, estimó que el proceso formal de aprobación se debe llevar en un análisis paralelo de lo que esté pasando en Washington.
En conferencia de prensa, explicó que si en dos años tras la conclusión de las negociaciones, hay seis países que lo ratifican y representan 85 por ciento del producto interno bruto (PIB) de la región, el acuerdo entrará en operación.
Más adelante puntualizó que no es un momento fácil para la economía mundial y la vulnerabilidad de los mercados financieros está presente. La expectativa es que el peso siga en la banda donde se ha movido.
También expuso que la economía mexicana sigue dando muestras de crecimiento y ha enfrentado el impacto de la baja del precio del petróleo.
Por último dijo que las reformas legislativas aprobadas y el ATP permitirán que las pequeñas empresas puedan estar en condiciones de competir.