Los 125 alcaldes electos del estado de México comenzaron a rendir protesta el pasado fin semana. Unos reciben administraciones endeudadas y con obras inconclusas; otros deberán encarar antiguos litigios laborales, con proveedores y prestadores de servicios.

La priísta Denisse Ugalde, hija de Arturo Ugalde, ex alcalde de Tlalnepantla, rindió protesta ayer ante el secretario general de Gobierno mexiquense, José Manzur. En ese acto fue abucheado el diputado federal Pablo Basáñez, presidente municipal con licencia de Tlalnepantla, quien dejó a Denisse Ugalde una deuda de más de 900 millones de pesos.

Ana Balderas protestó como presidenta municipal de Atizapán de Zaragoza, donde la espera una deuda de mil 500 millones de pesos, más de la mitad del presupuesto anual 2015 de la demarcación, que fue de 2 mil 500 millones de pesos.

El también panista Édgar Olvera rindió protesta como alcalde de Naucalpan, que arrastra un pasivo de más de mil 200 millones de pesos, al igual que 3 mil 500 demandas de ex trabajadores, proveedores y prestadores de servicios.

A su vez, el priísta Fernando Zamora rindió protesta como edil de Toluca y solicitó al gobernador mexiquense, Eruviel Ávila Villegas, que en su calidad de presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) promueva una reforma al artículo 115 constitucional a efecto de que termine la exención de pago de contribuciones a bienes propiedad de la Federación, estados y municipios, pues actualmente esos inmuebles no pagan predial ni derechos de agua.

Al rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, Jorge Olvera, presente en la toma de protesta, Zamora le pidió gestionar ante la Asociación Nacional de Instituciones de Educación Superior (Anuies) que todas las escuelas de educación superior de la capital mexiquense incluyan en sus presupuestos el pago de agua e instalen sistemas de ahorro hidrosanitario.

Mientras, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez, El Bronco anunció en Monterrey que en febrero próximo presentará denuncias por 100 casos de corrupción en el sexenio anterior, que encabezó el priísta Rodrigo Medina de la Cruz, en los cuales están involucrados medios de comunicación, empresas y funcionarios.