En seguimiento a criterios en los que la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha invalidado sentencias, en casos en los que se violó el debido proceso o en los que hay pruebas de que el sentenciado fue torturado para que se incriminara, ayer los ministros concedieron un amparo a Miguel Ángel Pérez Barroquín, quien denunció que fue torturado y acusado ilegalmente por el asesinato del secretario de Turismo de Jalisco, ocurrido en 2013.

Por unanimidad, los ministros anularon la sentencia en contra del acusado, a quien se le imputó que pertenecía al cártel Jalisco Nueva generación, y ordenaron a un juzgado federal reponer el procedimiento y dictar nueva sentencia. El acusado permanece privado de la libertad.

Barroquín fue detenido por policías estatales en 2013, según consta en el expediente que integró la Fiscalía General del Estado de Jalisco, quien lo responsabilizó de portar armas de fuego y cartuchos útiles de uso exclusivo de las fuerzas armadas, las cuales usaban él y otra persona cuando era necesario matar a alguien.

Pérez Barroquín fue sentenciado el 17 de febrero de 2014 a ocho años y ocho meses de prisión por el segundo tribunal unitario en materia penal del tercer circuito.

De acuerdo con la sentencia, ninguno de los policías que participaron en su captura informó con claridad en qué parte del automóvil estaban ocultas dos armas cortas y una subametralladora, además de cartuchos útiles.

Además, hay testimonios de especialistas que confirman que Barroquín fue torturado para confesar su culpabilidad y que, incluso, los policías lo amenazaron con matar a su esposa y a sus hijos si no admitía su responsabilidad.