Una oleada de construcciones de plazas y centros comerciales en la ciudad de México se desplaza del centro a la periferia de la capital, que buscan atraer compradores tanto de los sectores más pudientes en San Ángel y Jardines del Pedregal como de los menos favorecidos de los barrios y pueblos de Iztapalapa y Xochimilco.

De acuerdo con la información proporcionada por las delegaciones políticas y las desarrolladoras inmobiliarias, se construyen de manera simultánea 15 polos de atracción comercial, en grandes extensiones de terrenos para edificar condominios de lujo, hoteles, tiendas de autoservicio, salas de cine, parques recreativos y locales comerciales, con toda una variedad de marcas.

En conjunto, se han apropiado de una superficie de 819 mil metros cuadrados en cinco delegaciones: Azcapotzalco, Xochimilco, Álvaro Obregón, Tlalpan e Iztapalapa, que equivaldrían a casi 13 estadios Azteca.

Las millonarias inversiones, que van de 2 mil a 5 mil millones de pesos en cada una de las plazas comerciales, principalmente de cuatro empresas que acaparan el mercado: México Retail Properties (MRP), Fibra Danhos, Gicsa y Grupo Sordo Madaleno–, no han encontrado obstáculos para lograr los permisos con el fin de levantar malls de todos tamaños.

Estos van desde el complejo más pequeño y modesto, como Patio Revolución, en el número 1817 de la avenida del mismo nombre, en San Ángel, con una superficie de construcción de 11 mil metros cuadrados, 50 locales comerciales, una tienda de autoservicio, salas de cine, gimnasios y restaurantes, hasta el más grande y lujoso, ubicado en bulevar Adolfo Ruiz Cortines 3720, donde se construye el Picacho Lifestyle Center, en 407 mil 944 metros cuadrados.

Con la manufactura del grupo Sordo Madaleno, este último conjunto es un gran parque con plazas, espejos de agua, cuatro torres de oficinas y un centro comercial de cuatro niveles y un estacionamiento común de seis niveles subterráneos, que promete ser –según sus promotores– el nuevo ícono en el corazón del sur de la ciudad de México, en el que se invertirán 4 mil 900 millones de pesos.

Con cuatro plazas comerciales en operación, México Retail Properties –de la que es socio el empresario Jerónimo Gerard Rivero, cuñado del ex presidente Carlos Salinas de Gortari– se expande con cinco centros comerciales denominados patios o portales en Álvaro Obregón, Tlalpan, Iztapalapa y Azcapotzalco.

Además de las ampliaciones en las plazas Delta y Tezontle, el Fideicomiso de Inversión en Bienes Raíces (Fibra) Danhos busca posicionarse en la delegación Azcapotzalco con Vía Vallejo, con una superfice de construcción de 83 mil metros cuadrados, y Las Antenas, en Iztapalapa, de 86 mil 500 metros cuadrados. En ambos proyectos se estima una inversión de 8 mil 600 millones de pesos.

El norte y el sur de la ciudad se han convertido en los nuevos nichos para la expansión de estos polos comerciales. Xochimilco, que se había mantenido libre de plazas comerciales, ahora será invadida por tres, dos ya en proceso de construcción y una más que acaba de tramitar los permisos: Terrazas Arenal, Paseo Xochimilco y una aún sin nombre en Santiago Tepalcatlapan.

En su reporte en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la empresa Gicsa presume como uno de los grandes atractivos de Paseo Xochimilco –que contará con tiendas departamentales, cines, restaurantes y un centro de entretenimieto infantil– la ausencia de grandes cadenas departamentales y comercio organizado con un concepto de gran modernidad y funcionalidad en la zona.