La Iglesia católica mexicana ya está a la espera del papa Francisco, quien sin duda alguna iluminará sobre la situación que vive México, señaló el cardenal Norberto Rivera. Al respecto, el obispo de la diócesis de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, indicó que el pontífice vendrá a Chiapas no por ocurrencia, sino porque quiere estar cerca de las periferias, de los que están más olvidados, principalmente los indígenas.

En entrevista colectiva en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, Arizmendi Esquivel comentó que el pontífice está informado de la situación en Chiapas, pues nosotros se lo decimos, y porque lo sabe viene aquí, subrayó.

Irá al norte del país por los migrantes y los presos, y a Michoacán por la violencia. En Chiapas la pobreza y la marginación de los indígenas siempre nos ha llamado la atención; aunque hay cosas que han mejorado mucho, pues ya hay más caminos, electricidad, agua, clínicas, escuelas y universidades, todavía el margen de pobreza es muy alto, detalló Arizmendi Esquivel.

–¿Eso lo puede ver el Papa? –preguntó un reportero.

–Obviamente eso es lo primero que le decimos, y por eso, porque lo sabe, viene al estado; si no lo supiera, no hubiera venido –respondió.

Añadió: El Papa quiere estar cerca de los lugares donde hay problemas, para acompañar, iluminar y fortalecer a los católicos.

Arizmendi Esquivel recordó que más de 60 por ciento de los más de 2 millones de habitantes que abarca la diócesis a su cargo –que comprende 37 mil kilómetros cuadrados– son indígenas.

En la ciudad de México, durante su mensaje de ayer en la Catedral Metropolitana, el cardenal Rivera Carrera indicó que durante la visita –que comenzará el 12 de febrero del próximo año– el pontífice invitará a los creyentes a tomar más en serio el ser cristiano: discípulos y misioneros en esta patria y en el continente.

Según el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México, el papa Francisco será recibido por el presidente Enrique Peña Nieto, y entre sus múltiples actividades se prevé su asistencia a Palacio Nacional.

En otro tema, Norberto Rivera también habló durante la misa en catedral de que en esta época de separación jurídica entre Iglesia y Estado, los cristianos deben defender la libertad de expresión y manifestar abiertamente sus criterios y convicciones, los cuales deben ser escuchados dentro del sistema democrático.

Por otra parte, la publicación Desde la fe señaló en su editorial que los horrendos hechos terroristas de París nuevamente vuelven a provocar una reflexión seria y profunda sobre el islam.

Detalló que una vez más se abre el tema para reflexionar respecto del origen del odio y la violencia en nombre de Dios, y sostuvo que México no puede ser insensible ante la guerra del terrorismo. No se trata de un problema entre el Occidente europeo y los países islamistas; en el fondo se trata de un verdadero choque de culturas más que de religiones, y México pertenece, cultural e históricamente, a ese Occidente al que el islam ha declarado la guerra.

En el mismo sentido planteó que el país no puede regatear su apoyo a la guerra contra el terrorismo escudándose en la no intervención, pues de asumir esa postura pusilánime, tarde o temprano seremos víctimas de este flagelo.