Ante la oleada de nuevas construcciones y la instalación de giros mercantiles en los años recientes, vecinos de la colonia Roma Norte realizan un plan parcial de desarrollo urbano exclusivo para esta zona, que concentra mil 475 inmuebles con algún tipo de valor artístico o arquitectónico, los cuales comenzaron a ser destruidos en los pasados tres lustros.

El arquitecto Gerardo Sigg, quien desde hace dos años encabeza los trabajos de elaboración de este proyecto, explicó que se busca hacer compatible la preservación del patrimonio cultural con un desarrollo sustentable, ya que hasta ahora el programa delegacional no reconoce las condiciones específicas y el valor de la Roma.

Durante la presentación de un diagnóstico acerca de la colonia en la Casa Lamm, el urbanista Ignacio Bernabé indicó que a partir de 2000 se detuvo la pérdida de población, causada por el sismo de 1985, y comenzó el repoblamiento.

En este perímetro se registra el doble de población migrante en comparación con el resto de la demarcación, refirió, al precisar que la mayor saturación de viviendas, empresas y negocios se presenta en Insurgentes, Córdoba, Colima, Durango, Álvaro Obregón y Salamanca.

De 2011 a la fecha, abundó, se han tramitado ante la delegación Cuauhtémoc 130 solicitudes de demolición en esta colonia, sin contar con las que se realizan de manera clandestina. Los derribos pueden ser totales o parciales, es decir, desde un muro hasta un inmueble completo, muchos de ellos catalogados por su valor patrimonial, apuntó.

Consideró que esta situación obedece a la falta de creatividad de los constructores inmobiliarios, pues la razón por la que la gente decide vivir en la colonia Roma Norte es en gran medida por su entorno urbano. Si lo destruyen, ¿qué van a vender después?, cuestionó.

Destacó que esta transformación demográfica y constructiva ha impactado en el costo del suelo. En 2000 el metro cuadrado oscilaba los 12 mil 500 pesos y en 2014 se elevó a 30 mil, lo que significa que se ha más que duplicado su precio en un lapso de 15 años, expresó.

Señaló que el uso de suelo para equipamiento como escuelas, universidades y hospitales, entre otros, ha comenzado a extenderse, ya que aunque sólo 5 por ciento del total de los predios está destinado a esos fines, ocupan 26 por ciento de la superficie de la colonia.

Aunque la Roma Norte está conectada a todos los medios de transporte públicos y no hay motivo para el uso del automóvil, de 2006 a 2014 se construyeron 30 por ciento del total de estacionamientos que hay en la colonia y sus principales calles presentan tránsito lento y varias zonas con conflictos viales.

A la par de este diagnóstico, se realiza un listado de todos los inmuebles catalogados por su valor patrimonial, que sería incluído en el plan parcial.

Eva Morales, del comité ciudadano de la colonia Roma Norte, indicó que en este esfuerzo no han contado con el apoyo de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), por lo que buscarán ingresar el proyecto como una iniciativa popular a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.