Washington.

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, se mostró este martes dispuesto a debatir proyectos de ley para restringir a inmigrantes indocumentados en la frontera y en el interior del territorio estadunidense, al reiterar su rechazo a una reforma migratoria.

Debido a que la mayoría de los conservadores en la cámara baja se oponen a cualquier medida que pueda interpretarse como una amnistía para los 11.5 millones de inmigrantes que se calculan radican sin papeles en Estados Unidos, Ryan ha maniobrado cuidadosamente el tema migratorio.

En cuestiones de control tanto en la frontera como en el interior del país, donde creo que todos tenemos consenso, estaría bien si podemos avanzar, dijo Ryan al ofrecer la primera conferencia de prensa desde que asumió el liderazgo republicano.

Reiteró su rechazo a trabajar en una reforma integral del sistema migratorio mientras el demócrata Barack Obama permanezca en la presidencia.

La Casa Blanca acusó el lunes a Ryan de flirtrear con la extrema derecha de su partido en la cuestión migratoria.

Ryan, quien hasta el año pasado promovió una ley sobre migración después de que el Senado aprobó un proyecto que incluyó un mecanismo de naturalización para los inmigrantes, llegó a aceptar la eventual ciudadanía para los residentes sin documentos.