Toluca, Méx.

Dos lesionados y cuatro vehículos destruidos fue el saldo del rescate de dos mujeres agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), retenidas 10 horas por un centenar de pobladores de la comunidad de Tlachaloya.

El conflicto se originó cuando unos 30 agentes ministeriales acudieron a realizar un cateo a un domicilio la madrugada del viernes por una denuncia de robo de cable de luz, lo que molestó a los vecinos, que en minutos acudieron al lugar y acusaron a los ministeriales de ingresar al inmueble sin orden de cateo.

Algunos agentes hicieron disparos para dispersarlos, pero fueron expulsados al ser rebasados en número por los habitantes que con piedras y palos, retuvieron a Érika Vázquez Serrano y Georgina Arizmendi Roldán, a las que trasladaron a la delegación municipal. Enardecidos mencionaron que lincharían a las agentes adscritas a la Fiscalía de Asuntos Especiales de la procuraduría.

Al lugar, arribó el fiscal de asuntos especiales de la PGJEM quien durante horas negoció la liberación de las mujeres. Alrededor de las 9:30 horas se firmó un acuerdo para que accedieran a entregarlas, pero los pobladores que las tenían retenidas no estaban enterados y comenzó otro enfrentamiento.

En la reyerta, lograron sacarlas de la delegación estatal, donde algunos vecinos les lanzaron objetos y otros alcanzaron a golpearlas. A una la introdujeron a un auto compacto contra el que los pobladores arrojaron piedras, palos y botellas. La otra mujer quedó atrapada en una tienda, por lo que debió intervenir el grupo antimotines de la policía estatal, que con gases lacrimógenos pudo dispersar a la gente y sacar del poblado a la mujer.

Varios vecinos se enfrentaron durante más de 10 minutos con los policías, que se retiraron del lugar dejando abandonadas un par de patrullas las cuales fueron destruidas. A una la voltearon y a otro le prendieron fuego. También dañaron un par de vehículos oficiales más.