Ese beneficio cubrirá a 150 municipios más de los 300 incluidos en la cruzada contra el hambre
Lunes 19 de octubre de 2015, p. 21
Los habitantes de las comunidades indígenas de Oaxaca, Guerrero y Chiapas pagarán un precio simbólico de un peso por litro de leche para revertir los cuadros de anemia; en breve el consejo de administración de Liconsa difundirá la determinación, informó Héctor Pablo Ramírez Puga, director de la paraestatal.
La propuesta es que dicho beneficio sea extensivo a la población de 150 municipios adicionales a los 300 que están en la Cruzada Nacional contra el Hambre, donde están los más pobres entre los pobres
, por lo que a la brevedad también se hará extensivo a los indígenas de Chihuahua, Hidalgo y San Luis Potosí. Para impulsar el consumo de la leche en esas regiones se desarrolla una campaña junto con Prospera y el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos.
El pasado julio Liconsa incrementó 22 por ciento el precio de la leche, el cual pasó de 4.50 a 5.50 pesos por litro, para recaudar mil millones de pesos; la paraestatal vende cuatro litros por beneficiario. El aumento no se aplicó a los usuarios de Chiapas, Guerrero y Oaxaca, por ser estados prioritarios de la Cruzada Nacional contra el Hambre.
Ramírez Puga aseguró que no se reducirá la compra de leche a los 11 mil pequeños ganaderos, por el contrario la meta es aumentar las adquisiciones para que al concluir el actual gobierno toda la leche que distribuya Liconsa –mil millones de litros anuales– sea de los pequeños ganaderos. En dos años y medio, esta administración pasó de 9 mil a 11 mil productores. Además, en este año se tuvo una compra de leche nacional por encima de lo esperado; se llegará a 850 millones de litros al cierre de 2015. Hace tres años las compras fueron de 700 millones de litros.
Tampoco disminuirá el volumen de compras ni el precio que se paga los productores, a pesar de que el precio de la leche importada es de cuatro pesos por litro, en tanto a los ganaderos del país se les paga 6.20 pesos por litro, dependiendo de la calidad y permanencia de los productores. Estamos del lado de los ganaderos, hemos estirado el presupuesto al máximo y continuaremos con la compra de leche. No hay motivo de preocupación; estamos trabajando con la Secretaría de Agricultura respecto a la adquisición de leche.
La Secretaría de Hacienda propuso un recorte de 500 mil millones de pesos, lo cual, de aprobarse por el Congreso de la Unión –asentó Ramírez Puga–, no implicará ni reducir el número de beneficiarios ni las compras de leche a los ganaderos del país. El padrón de beneficiarios, que actualmente es de 6.4 millones de personas, continuará incrementándose, sobre todo en los municipios de la Cruzada Nacional contra el Hambre. La meta es aumentarlo en 200 mil anualmente para, al final del sexenio, llegar a más de 7 millones de personas.
Explicó que los 500 millones de pesos anuales que obtiene Liconsa por la venta de las grasas que quita a la leche se reinvierten para dar mantenimiento a las plantas e incrementar el padrón de beneficiarios. También se trabaja con el sector productivo del ramo para la instalación de plantas de secado. En Jalisco está por iniciar sus actividades una de ellas, el compromiso de la parestatal es seguir comprando el alimento a los ganaderos y conservar la calidad.