Desde el 20 de abril no se ha podido cubrir la vacante de Luna Ramos en el TEPJF
Lunes 19 de octubre de 2015, p. 6
Además de las dos vacantes en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Senado tiene pendientes de resolver más de 50 nombramientos de magistrados electorales y agrarios, de consejeros independientes de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de integrantes de organismos autónomos, entre otros, varios de ellos con plazos ya vencidos.
Uno de los casos que mayor debate ha provocado es el nombramiento del magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que habrá de sustituir a Alejandro Luna Ramos, cuya gestión venció el pasado 20 de abril y que no ha podido cubrirse su lugar por el desacuerdo entre las fuerzas políticas de oposición a aceptar al candidato que el PRI quiere imponer.
El TEPJF tiene seis meses con sólo seis de sus siete integrantes. El PRI se negó incluso a llamar a un periodo extraordinario de sesiones en mayo pasado para designar al magistrado de entre la terna que el presidente Enrique Peña Nieto remitió al Senado el 10 de marzo pasado.
En la terna figuran los magistrados Enrique Aguirre Saldívar, Julio César Cruz Ricárdez y Javier Aguayo Silva. Este último ligado a María del Carmen Alanís, es el candidato que el PRI impulsó, pero ni PAN ni PRD lo apoyan, lo que tiene frenado el nombramiento.
Igualmente hay otros nombramientos rezagados por desacuerdo de las fuerzas opositoras con las propuestas de Peña Nieto. Una de ellas es la vacante en el Tribunal Superior Agrario, que está sin cubrir desde septiembre de 2013, cuando renunció el magistrado Luis Octavio Porte Petit Moreno. El Ejecutivo remitió ese mismo mes la propuesta, integrada por Concepción María del Rocío Balderas y Rubén Gallardo, pero las comisiones de Justicia y Reforma Agraria no la han dictaminado.
Tampoco se ha dictaminado la propuesta presidencial para ratificar a cuatro nuevos magistrados numerarios del Tribunal Unitario Agrario y la confirmación para un cargo similar de Antonio Luis Betancourt.
El consejo de administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) está sin uno de sus consejeros independientes desde el 17 de febrero, en que renunció Jaime Lomelín. En su lugar, Peña Nieto remitió el nombramiento de Héctor Moreira Rodríguez, el 15 de abril, pero no se ha procesado.
En esa misma fecha, el Ejecutivo federal mandó al Senado el nombramiento de José Julián Sidaoui como miembro independiente del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo, con el propósito de que sustituya a Arturo Manuel Fernández Fuentes. Está pendiente de resolución en la Comisión de Energía.
Falta también de procesar la ratificación de dos integrantes de la Comisión de Hidrocarburos. El 21 de abril pasado, Peña Nieto envió las ternas, pero tampoco se han dictaminado en el Senado.
El presidente Peña Nieto está igualmente incurriendo en falta, ya que no ha remitido las propuestas para sustituir a dos integrantes de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, pese a que los periodos de María Olga Noriega Sáenz y María del Rosario Torres concluyeron en octubre del año pasado.
Al Ejecutivo federal se le ha pasado también remitir al Senado las propuestas para sustituir a dos integrantes de la Comisión Reguladora de Energía, luego de que terminaron los periodos de Francisco Barnés de Castro, en febrero de 2014, y de Xavier Salazar Diez de Sollano, el 31 de diciembre.
Aunado a ese rezago, el Senado tiene que nombrar también a 21 magistrados de sala regional y dos magistrados supernumerarios del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, que el Ejecutivo federal remitió a esa cámara el martes pasado.
