Aunque hace dos días el cuarto tribunal colegiado civil de Jalisco ordenó regresar a Angélica Fuentes la administración del club Guadalajara, otro juzgado federal, el décimo de distrito en el mismo estado, dio entrada a una nueva demanda mercantil presentada por los abogados de Jorge Vergara, y en el mismo auto de admisión fijó medidas precautorias que impiden a su esposa reasumir el control administrativo del equipo, informaron funcionarios del Poder Judicial Federal.

Javier Coello Trejo, defensor del empresario, dijo ayer en diversas entrevistas que tienen manera de demostrar que Fuentes no posee una sola acción de Grupo Omnilife ni de Chivas, mientras José Armando Solís, del equipo de litigantes del despacho Collado y asociados (defensores de Angélica), sostuvo que la resolución del cuarto tribunal colegiado sí permite a su cliente reasumir el control del equipo.

Coello, ex subprocurador de la Procuraduría General de la República, a quien en su momento se conoció como fiscal de hierro, precisó que la aún esposa de Vergara depositó 64 millones de dólares en 2012 de una cuenta bancaria del empresario abierta en JP Morgan a otra a nombre de ella: En un solo día hizo la transferencia de más de 60 millones de dólares.

Fuentes es dueña de la mitad de las acciones de Grupo Omnilife y de Chivas.

La señora además tiene mucho que explicar, como haber sacado de una cuenta de HSBC (a nombre de Jorge Vergara) 2 mil 300 millones de pesos entre 2008 y 2014, dijo Coello.

Según el penalista, su cliente se dio cuenta del propósito de su esposa de dejarlo en la calle hasta finales de 2014: Parece que tardó en darse cuenta, pero es que él confió en su mujer, no se dio cuenta porque es un empresario que maneja muchas cosas, anda fuera, viaja mucho a Estados Unidos, pero él simplemente confió en su esposa.

Solís de Anda, abogado de Fuentes, dijo por su parte que la orden de aprehensión girada contra su cliente es por la disposición de una pintura y no por administración fraudulenta.

Agregó que Fuentes permanecerá en Texas. Las autoridades aprobaron un arraigo de protección para la empresaria, quien teme por su integridad física.

Ella habría pagado una garantía de un millón de dólares para recuperar el control del club Guadalajara, según reportes de algunos medios en portales digitales.