En una sesión que sólo sirvió para desahogar iniciativas de diputados, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) propuso una reforma a la Constitución para formalizar una de las promesas que en la campaña de 2012 hizo el presidente Enrique Peña Nieto y reducir en 100 el número de diputados plurinominales, para que la cámara se integre por 400 y acotar que ningún partido pueda tener más de 200.

Al presentar la iniciativa, el priísta Fernando Quetzalcóatl Moctezuma Pereda pidió que el Canal del Congreso hiciera una toma del salón, que a las dos de la tarde estaba prácticamente vacío, para dar sustento al hecho de que no se requieren más legisladores.

Hay una demanda histórica de la población mexicana. Se han recabado firmas para ver qué opina la población de disminuir a la mitad el número de representación proporcional en la Cámara y es alarmante la gran cantidad que pide reducir el número de representantes populares, mencionó.

El Partido Acción Nacional (PAN) presentó una iniciativa para suprimir la tasa de 16 por ciento del impuesto al valor agregado a los alimentos procesados para perros, gatos y pequeñas especies utilizadas como mascotas en el hogar.

En la tribuna el diputado Federico Döring recordó que en la reforma fiscal presentada por el presidente Enrique Peña Nieto en 2013, y que entró en vigor en 2014, el Ejecutivo argumentó que quienes compran comida para mascotas reflejan capacidad contributiva y, en consecuencia, se trata de manifestaciones de riqueza que deben ser gravadas.

Afirmó que diversas encuestas han reflejado que no existe una relación entre el poder adquisitivo de las personas y la posesión de mascotas, lo cual desmiente la hipótesis del gobierno federal sobre el nivel socioeconómico de los dueños de animales de compañía.

Döring dijo que con la aplicación del 16 por ciento del IVA a los alimentos procesados para mascotas se generaron impactos negativos en la industria y los consumidores, así como un entorno más complicado para las mascotas e inclusive detonó problemas de salud pública.

Citó experiencias de asociaciones defensoras de los animales sobre que los albergues incrementaron sus gastos de alimentación o que los consumidores se vieron obligados a comprar alimento de menor calidad.