Oaxaca, Oax.

El pintor oaxaqueño Sergio Hernández acusó al gobernador Gabino Cué Monteagudo de corrupto y de construir su propia casa blanca en la agencia municipal de San Felipe del Agua, por lo cual lo denunciará ante la Procuraduría General de la República (PGE) por enriquecimiento ilícito.

También acusó al mandatario de perseguirlos a él y al artista plástico Francisco Toledo por oponerse a la construcción del Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO) en el cerro del Fortín.

En entrevista, aseguró que durante su sexenio, que se inició en diciembre de 2010, Cué Monteagudo adquirió una millonaria casa en la playa de Zicatela, en la agencia municipal de Puerto Escondido, así como un edificio en Polanco, en la ciudad de México.

Aseveró que Gabino Cué se ha enriquecido en forma inexplicable y retó al gobernante a demostrar que ha adquirido los inmuebles mencionados con dinero propio. Adelantó que en la denuncia ante la PGR incluirá a Jorge Castillo Díaz, señalado como operador político del mandatario.

Sergio Hernández criticó a medios locales por publicar una nota en la cual lo acusan de ser un depredador por construir una casa en la costa. Aseguró tener tener todos los permisos para la edificación y señaló que la nota salió de las oficinas del gobernador.

Hasta ahora se desconoce si Gabino Cué presentó su declaración patrimonial, como dijo que lo haría en diciembre de 2014, pues la Secretaría de la Contraloría y Transparencia Gubernamental resguarda esa información y sólo puede revelarla con permiso del funcionario. En su página personal (www.gabinocue.org), la cual tiene sellos e información de la administración estatal, la última declaración patrimonial registrada corresponde a 2009, un año antes de que asumiera la gubernatura.

En noviembre de 2014, una investigación periodística reveló que el presidente Enrique Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera, adquirieron una vivienda con valor de 7.5 millones de dólares en las Lomas de Chapultepec. El inmueble fue comprado a una empresa del Grupo Higa, cuyo principal accionista es Juan Armando Hinojosa, contratista favorecido por Peña Nieto desde que éste era gobernador del estado de México. La vivienda ya es conocida como la casa blanca.