El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) ordenó a Petróleos Mexicanos hacer pública la información relacionada con la cantidad de gasolina o petróleo que le ha sido robada de enero de 2012 a agosto de 2015, con lo que revocó la respuesta ofrecida a un particular al remitirlo a los informes sobre el tema.

El organismo determinó que Pemex no atendió adecuadamente los requerimientos de información sobre el robo a los ductos, situación que se ha convertido en un importante problema para las finanzas de la empresa y del país, pero al mismo tiempo en un potencial conflicto ambiental por los efectos que pueden tener las tomas clandestinas, sostuvo Patricia Kurczyn, la comisionada ponente.

Remitir al particular solamente a consultar los informes de la Unidad de Estadística Jurídica, Control de Procesos y Proyectos de la Dirección Jurídica del Sujeto Obligado no se consideró apropiado e, incluso, la comisionada la definió como descuidado.

De la búsqueda realizada por el Inai a lo largo del procedimiento se detectó un comunicado de la Cámara de Diputados que da cuenta de la comparecencia del director de Pemex en septiembre de 2014, en el que informó que hasta agosto de ese año, el volumen de combustible sustraido de las tomas clandestinas había ascendido a 7.5 millones de barriles que equivalían, en dinero, a 15 mil 300 millones de pesos.

Se instruyó que realice una búsqueda exhaustiva para dar cuenta de la gasolina o el petróleo que ha sido robado en las distintas entidades en el periodo referido.