Chamula, Chis.

Domingo López González hizo honor a su apodo, Tsetjol (corta cabeza), pues por primera vez en más de 70 años venció al Partido Revolucionario Institucional (PRI) en San Juan Chamula, lo que generó una revuelta entre dirigentes y militantes priístas, quienes lo acusan de traidor, de cacique y de ganar las votaciones con el uso de recursos públicos y compra de votos.

López González, quien era priísta como su padre, pasará a la historia no sólo por haber arrebatado al PRI la alcaldía de Chamula como candidato del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), sino por ser el primero en relegirse como alcalde, puesto que ocupó de 2008 a 2010, postulado por el tricolor.

Domingo, quien gobernará tres años a partir del primero de octubre, ganó las elecciones del pasado 19 de julio con 20 mil 12 votos contra 10 mil 43 de su contrincante del PRI, Marcelino González López.

Durante más de 70 años, en este municipio tzotzil de los Altos de Chiapas, uno de los símbolos indígenas de México y probablemente la comunidad étnica más visitada del país por su cultura, los caciques que controlaban la política, la religión y la economía vociferaban: En Chamula todos somos priístas y católicos tradicionalistas.

En nombre de esa costumbre impuesta por ellos mismos, durante más de siete décadas impidieron que un partido opositor al PRI gobernara el municipio y de la década de 1970 hasta finales del siglo pasado expulsaron de sus comunidades a miles de indígenas que se convirtieron al cristianismo evangélico o acudían a las misas oficiadas por sacerdotes de la diócesis de San Cristóbal de Las Casas.

Devoto de San Juan, patrono de Chamula, López González afirmó que este santo tuvo que ver en su relección. Gracias a que nos apoyó al lado de nuestros usos y costumbres es que ganamos. Si San Juan no hubiera querido que ganara otra vez, habría perdido, dijo entrevistado en su casa.

–¿Entonces San Juan no es priísta, como decían los caciques?

–Pidiéndole favor, él le va a todos. Es que por usos y costumbres nosotros le rezamos a San Juan para que nos apoye y nos junte a la gente. Le pedimos por medio de rezos para ganar la presidencia porque no es así nomás con la gente, hay que rezar. Hasta ahorita estoy rezando. Allí (en la sala de su casa) están mis velas pidiéndole de favor a San Juan que nos apoye más.

–A usted le dicen Tsetjol (que también significa cabeza redonda o corte de pelo redondo).

–Sí, es el apodo de mis antepasados, desde mi abuelo y mi papá, y yo vine así también.

–¿Le enoja que le digan así?

–No. ¿Por qué me voy a enojar, si es mi apodo? Al contrario, me siento contento porque soy conocido a nivel nacional; hasta el Presidente de la República lo sabe ya. (Durante sus dos visitas como Presidente a esta cabecera municipal, el panista Felipe Calderón Hinojosa lo llamó así). El gobernador me dice Tsetjol. ¿Qué voy a hacer? Y no me enojo porque es mi apodo. Mi papá era Tsetjol y fue autoridad tradicional hace como 20 años.

–¿Y usted le cortó la cabeza al PRI?

–Ya perdió. Ja, ja. ¿Qué más hacemos?

–¿Su corazón es rojo o verde?

–Ahora es ciento por ciento verde porque estoy en el PVEM. Aquí vamos a echarle ganas hasta donde se pueda, varios periodos.

No van a ganar en tribunales

De 55 años de edad López González, quien ya piensa en hacer un buen trabajo a fin de relegirse para el siguiente trienio, negó que haya ganado mediante la compra de votos:

Sí le di apoyo en fertilizantes a la gente, pero antes de las votaciones. No repartí nada a la hora de las votaciones; están echando mentira. Ya no van a ganar en los tribunales. Ni modos, así es: unos ganan, otros no.

–Algunos decían que cuando perdiera el PRI en Chamula, San Juan caería de su sitio en el templo.

–No se cayó. Queda lo mismo. Al contrario, vamos a reforzarlo para que no caiga. Que no se pierdan los usos y costumbres. Mucha gente dice que ganando otro partido se perderían las costumbres y tradiciones, las fiestas, pero al contrario, se van a reforzar más.