En su último día asistieron a la exposición unos 6 mil visitantes
Se exhibirá en Guanajuato del 15 de octubre al 10 de enero de 2016
Martes 29 de septiembre de 2015, p. 6
Hasta el filo de la medianoche del domingo, los visitantes aprovecharon para recorrer la exposición Miguel Ángel Buonarroti: un artista entre dos mundos, que concluyó su estadía en el Museo del Palacio de Bellas Artes, cuya asistencia, junto con la muestra Leonardo da Vinci y la idea de la belleza, llegó a un total de 386 mil 178 espectadores.
La muestra de Miguel Ángel recibió junto con la de Da Vinci 330 mil visitantes hasta el 23 de agosto. El último día de exhibición llegaron más de 6 mil visitantes.
Miguel Ángel Buonarroti: un artista entre dos mundos continuará su periplo, a partir del 15 de octubre, en el Parque Bicentenario de Guanajuato. Al igual que la de Leonardo da Vinci, llegó a México luego de negociaciones realizadas por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), que preside Rafael Tovar y de Teresa.
A las ocho de la noche del domingo se habían repartido más de 6 mil entradas, y hacia las 23:30 horas José Roberto Yáñez, quien llegó de Hermosillo, Sonora, especialmente para ver la muestra, se convirtió en la última persona en recibir un boleto de ingreso.
Deja buen sabor de boca, tanto a la audiencia como en los organizadores, acercarnos a bocetos, incluso obra que ni siquiera se exhibe en Italia. Fue un verdadero privilegio
, expresó Victoria Martínez, mediadora del Museo del Palacio de Bellas Artes.
Consideró que si bien la exposición no incluía las obras más famosas del artista florentino, sí contaba con una buena recopilación de piezas representativas de su trabajo.
“El Cristo Portacroce se llevó las palmas, porque era la primera vez que se podía ver en 360 grados. Es una pieza original que nunca había salido de Italia y nadie pensó que México podía ser el país elegido para su exhibición y cruzaría el Atlántico para llegar hasta acá.”
Otra obra que generó reacciones que sorprendieron a los custodios de la sala fue la réplica de la escultura de La piedad.
Hubo gente que se hincó, lloró, se persignó o que se iba y regresaba, porque no quería dejar de verla. Aunque sabíamos que era una réplica, es una escultura muy hermosa. Me siento triste porque ya se va
, comentó Margarita Meza, quien se encargó de custodiarla desde las ocho de la mañana hasta la medianoche en su último fin de semana.
El pintor Óscar Ramírez quiso aprovechar al máximo la experiencia de encontrarse frente a las creaciones de Miguel Ángel para dibujar frente a la escultura del Cristo Portacroce, tal como hizo con algunas piezas de la exposición de Leonardo da Vinci.
“Tuve la osadía de ponerme a dibujar inspirado en que los pintores de antaño también lo hacían. Ahora Miguel Ángel me abrió las puertas para diseñar mis bocetos, guardarlos como recuerdo, verlos y desdoblar un estilo propio que tal vez me permita hacer alguna serie emulando a este gran maestro (…) Vemos que no sólo era escultor, sino un grandioso y supremo pintor. Miguel Ángel es el pintor de la luz y la divinidad.”
Tras su estancia en Bellas Artes se exhibirá del 15 de octubre de 2015 al 10 de enero de 2016 en el Parque Guanajuato Bicentenario, en Guanajuato.
Las magnas exposiciones fueron inauguradas el 25 de junio pasado y tuvieron una asistencia masiva, incluso visitas agendadas mediante el sistema Ticketmaster y la venta en taquilla para que el ingreso fuera intermitente. Finalmente, Da Vinci se despidió con un concurrido maratón que generó gran asistencia. No fue el caso de la exposición dedicada a Miguel Ángel.