Lunes 28 de septiembre de 2015, p. 28
Volkswagen fue advertida hace años de los riesgos que corría con el programa para manipular pruebas de emisiones, de acuerdo con la prensa dominical alemana. En 2007 la alemana Bosch entregó a la fabricante el programa que originó el escándalo de los motores trucados, y advirtió que su instalación en vehículos era ilegal
, afirma el diario alemán Bild. Fue en ese año cuando Volkswagen empezó a instalar el programa en los motores diésel para modificar los resultados de los controles y ahorrar dinero. Además, según el diario Frankfuter Allgemeine Zeitung, un empleado de Volkswagen habría hecho una advertencia interna en 2011 alertando que ese software podría ser violatorio de la ley. La investigación interna de la compañía no ha determinado por qué los altos mandos no reaccionaron antes. Martin Winterkorn, quien renunció esta semana a la presidencia ejecutiva de Volkswagen, recibió una remuneración de 16 millones de euros el año pasado, la más alta para cualquier puesto similar entre las grandes compañías alemanas.