Conmemoran 50 años de la publicación de La democracia en México, libro del sociólogo
Los exhorta a prepararse no sólo en su inteligencia y conocimientos, sino en su voluntad y coraje
Es un momento histórico para la humanidad en el que la crisis será muy seria, muy profunda e inesperada, pero también de creación; imagínense qué será de la ciudad de México en 10 años
Viernes 25 de septiembre de 2015, p. 3
El sociólogo Pablo González Casanova (Toluca, 1922) hizo ayer un llamado a la juventud mexicana para enfrentar la profunda crisis del mundo contemporáneo y el desolador panorama que se avecina.
Deben prepararse para ello, y no sólo en su inteligencia y sus conocimientos, sino también en su voluntad y coraje
, dijo el reconocido intelectual en el acto para conmemorar el cincuentenario de la publicación de su libro La democracia en México.
El encuentro académico, en el que se efectuaron dos mesas redondas y un conversatorio, fue organizado por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), de la que el investigador y profesor emérito fue rector en los albores de los años 70 del siglo pasado.
Colaborador de La Jornada, Pablo González Casanova se dirigió a los estudiantes universitarios que abarrotaron el auditorio que lleva su nombre para hacerles ver que el libertador Simón Bolívar, como ha ocurrido con la mayoría de los héroes en la historia, tenía más o menos la misma edad que ellos cuando logró la independencia de Venezuela y Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia.
Paso por El Colegio de México
Quiero invitarlos a que asuman, dentro de su juventud, el papel de hombres y mujeres que están dentro de la lucha de un mundo que van a vivir y en el que van a requerir de todos esos elementos (inteligencia, conocimientos, voluntad y coraje) y muchos más, porque es un momento histórico para la humanidad, en el que la crisis será muy seria, muy profunda e inesperada
, alertó González Casanova.
Va a ser la crisis de las ciudades. Imagínense qué será de la ciudad de México en 10 años, los distintos problemas actuales del ecosistema; verán que será un momento de crisis, pero también uno de creación.
Al respecto, recordó que las culturas orientales, precisamente, identifican el término crisis con la creación y concluyó su discurso con una reiteración.
He venido a contarles un poco de mi historia y, por otro lado, a invitarlos a que den la gran lucha por el conocimiento, por la moral social y cooperativa, por la moral de lucha y por la inteligencia
.
Antes, González Casanova rememoró sus dos años de estudiante en la carrera de derecho y cómo llegó a la Universidad Nacional para permanecer en ella para siempre, sin dejar de lado lo determinante que fue para su formación su paso por El Colegio de México.
En esta institución, dijo, abrevó en profesores venidos de España que tenían un altísimo nivel de conocimientos, de espíritu crítico, de libertad, de protesta, de moral política y personal y de alegría.
Aprendí ciencia política, sociología, una visión del mundo en la que se integran todas las ciencias y disciplinas para tener idea del ser humano y los proyectos que puede llevar a cabo
, afirmó.
“Aquella enseñanza del vínculo entre las ciencias sociales y el coraje –en el sentido doble de la palabra, como enfurecimiento y decisión de luchar– son fundamentales en las ciencias sociales.”
Por el derecho a ser apasionados
Pablo González Casanova suscribió lo dicho por el filósofo francés Blaise Pascal en el sentido de que el corazón tiene razones que la razón no comprende, para defender el derecho de las personas a ser apasionadas.
“No sólo razonar, necesitamos tener voluntad de lucha. Todo esto es o constituye la base de las ciencias sociales. De otra manera es imposible acometerlas.
Inmediatamente, cae uno en las distintas trampas del lenguaje: el lenguaje estadístico, el habitual, el de las especialidades o las minucias.
Luego de develar el nombre de Pablo González Casanova en el auditorio de reciente construcción, el director de la FCPyS, Fernando Castañeda, destacó la relevancia del libro La democracia en México.
Sostuvo que esa obra permitió abrir todo un horizonte para las ciencias sociales en México, construir agendas y generar muchas líneas de investigación.
“Sus injerencias en las ciencias sociales son amplias para la discusión sobre la democracia, la exclusión social, la desigualdad, las diferencias sobre la modernidad y sus otras caras, el colonialismo interno.
Es un texto clásico que se resignifica en el tiempo; hay muchas lecturas hoy y seguramente habrá muchas más en el futuro. Lo importante es que esas lecturas siguen haciendo vigente al libro.