Se da desde los niveles más altos del gobierno de México, señala el organismo
La desaparición de 43 estudiantes, ‘‘uno de los peores escándalos de derechos humanos en la historia reciente’’, dice
‘‘Cualquiera puede desaparecer forzadamente como por arte de magia’’
Jueves 24 de septiembre de 2015, p. 5
Desde los niveles más altos del gobierno de México existe un ‘‘escandaloso encubrimiento’’ de los responsables de la desaparición forzada de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, en Guerrero, afirmó Amnistía Internacional (AI).
El organismo resaltó que los hechos ocurridos en Iguala el 26 y 27 de septiembre de 2014 son una tragedia, ‘‘uno de los peores escándalos de derechos humanos en la historia reciente de México’’. Debido a las deficiencias en las investigaciones y a que a un año no existan avances para conocer la verdad, lo que queda como evidencia es que ‘‘cualquiera puede desaparecer forzadamente como por arte de magia en el país, mientras quienes están en el poder se enfocan en cubrir las huellas’’.
Señaló que las autoridades han tenido un manejo negligente de la investigación y agregó que el titular del Ejecutivo seguirá a ojos de la comunidad internacional ‘‘como el facilitador de estos horrores’’, a menos que adopte una acción real, agregó.
El pronunciamiento de Amnistía Internacional se dio la víspera de la reunión que este jueves sostendrá el presidente Enrique Peña Nieto con los padres y madres de los jóvenes normalistas desaparecidos y lesionados. Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de la agrupación, puntualizó: ‘‘La inquebrantable determinación del gobierno mexicano de convencer al mundo que los estudiantes fueron asesinados por una banda de narcotraficantes y sus restos quemados en un basurero está actuando como una distracción de cualquier otra valiosa línea de investigación’’.
La activista insistió en que falta explorar la actuación que tuvieron los militares e impartidores de justicia, sobre todo de quienes no intervinieron a pesar de ser conscientes de los abusos cometidos contra los estudiantes en el momento en que se estaban llevando a cabo.
Recordó que la desaparición de los normalistas ocurrió luego de que fueron detenidos por policías municipales de Iguala y desde entonces se ha dado información sobre la supuesta identificación de los restos del estudiante Alexander Mora Venancio, de 19 años. Hace unos días, las autoridades dieron cuenta de otro hallazgo: la identificación, por un hueso, de Jhosivani Guerrero de la Cruz.
Negligencia forense
Sin embargo, señaló, expertos del equipo argentino de antropología forense han dicho que no es concluyente el examen de ADN sobre estos últimos restos.
Al abundar sobre las fallas que ha tenido la indagatoria del gobierno mexicano, Amnistía Internacional resaltó que también hubo negligencia en el manejo de la evidencia forense, porque nunca fue procesada. Los oficiales que llegaron la noche en que los estudiantes fueron detenidos en Iguala no tomaron fotos ni recolectaron muestras de sangre, ropa o huellas dactilares.
A estos y otros elementos, como la oposición a que se entrevistara a los militares que se encontraban en la zona donde los normalistas desaparecieron, se suman las conclusiones del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), según las cuales es científicamente imposible que 43 cuerpos fueran incinerados en un basurero en el municipio de Cocula, en las condiciones expuestas por las autoridades.