Unos 450 alumnos de la escuela Guillermo Prieto, en la colonia La Laguna del municipio de Ecatepec, estado de México, se turnan para tomar clases cada tercer día debido a que seis de los 12 salones del plantel están inundados desde hace tres meses por las lluvias, y la primaria no tiene drenaje, del que la comunidad también carece.

Los padres de 50 menores los cambiaron de escuela; además, decenas de alumnos padecen infecciones de piel y ojos por el agua estancada, mezclada con la que brota de fosas sépticas.

Prácticamente la mitad de la escuela está inundada desde junio, cuando se anegaron seis salones y parte del patio.

Directivos y padres determinaron hace dos semanas que lunes, miércoles y viernes acudan a clases los grupos A de cada grado, y martes y jueves, los B.

La mayoría de los alumnos lleva botas de hule. Fuera de la escuela, además de puestos de dulces, hay vendedores ambulantes que ofrecen este calzado.

No hemos podido sacar el agua porque las calles también están inundadas y sacarla perjudicaría a los vecinos, dijo Lorena Ortega, directora del plantel.

Indicó que autoridades les enviaron un camión aspiradora para sacar el agua, pero no ha bastado, porque hace dos o tres viajes y al día siguiente la primaria sigue igual debido a que el terreno es fangoso y brota agua del subsuelo.

Directivos de la escuela y padres de familia han recurrido a funcionarios estatales y municipales, quienes sólo han hecho un diagnóstico y un estudio de suelo. Les prometieron elevar el patio y los salones, pero sería el próximo año, aclaró Ortega.

En tanto, la Secretaría de Salud del estado de México instaló cercos de salubridad en colonias y barrios de los municipios mexiquenses de Ocoyoacac, Metepec, San Mateo, Atenco y Toluca, inundados en días recientes. Además continúa la limpieza en Tultitlán, donde el fin de semana pasado decenas de familias perdieron enseres y muebles.