Sábado 19 de septiembre de 2015, p. 34
Tovarnik, Croacia.
Los países de los Balcanes y de Europa central se atrincheraban este viernes para impedir la entrada de migrantes. Hungría comenzó a levantar una valla alambrada en su frontera con Croacia, después de terminar otra similar a lo largo de 175 kilómetros que comparte con Serbia, informó el primer ministro húngaro Viktor Orban. La valla abarcará 41 kilómetros de tierra firme y los otros 330 kilómetros los ocupa el río Drave, difícil de cruzar.
La ruta de los Balcanes aún existe. El hecho de que la frontera serbia húngara esté cerrada no ha frenado las nuevas llegadas
, lamentó el jefe de gobierno conservador.
Desde que Hungría cerró el martes su frontera con Serbia con una alambrada de púas, los refugiados que huyen de Siria e Irak tratan de abrirse camino por Croacia y Eslovenia.
El miércoles por la mañana llegaron a Zagreb 13 mil 300 migrantes que pasaron por Serbia.
El ministro croata de Interior, Ranko Ostojic, declaró que la capacidad para refugiar a más personas está saturada
y el gobierno ordenó el cierre de siete de sus ocho cruces fronterizos con Serbia.