El gobierno mexicano demandó a su similar de Egipto una ‘‘investigación exhaustiva, expedita y a fondo’’ de los hechos ocurridos el pasado 13 de este mes en el desierto occidental de ese país, donde murieron ocho connacionales y seis más resultaron heridos. Esa indagatoria debe llevar a conocer con exactitud ‘‘qué fue lo que ocurrió’’.

El presidente Enrique Peña Nieto habló telefónicamente el martes, alrededor de las 11 de la mañana, con Abdel Fattah Al-Sisi, presidente de Egipto, quien, según un comunicado de la Presidencia de la República, ‘‘expresó en nombre del pueblo y el gobierno’’ de su país sus más sentidas condolencias ‘‘y profundo pesar por el trágico incidente’’ del domingo anterior.

Horas antes de dar cuenta de esta conversación, el jefe del Ejecutivo había publicado en su cuenta de Twitter que se había confirmado el fallecimiento de los ocho connacionales, y además de expresar condolencias a deudos y amigos reiteraba la disposición del gobierno mexicano para otorgarles respaldo y apoyo.

En la conversación con Fattah Al-Sisi, el mandatario mexicano ‘‘le manifestó su profunda consternación y tristeza por la pérdida de vida de nuestros connacionales, así como el dolor y la indignación que estos hechos inéditos han causado en la sociedad mexicana’’.

El presidente Peña Nieto le expresó asimismo ‘‘su preocupación por las personas heridas y le solicitó que reciban la mejor atención médica posible’’.

Además, le detalló el sentido de la misión mexicana, encabezada por la canciller Claudia Ruiz Massieu, y le pidió dar el apoyo necesario a los heridos, repatriar a los mexicanos ‘‘a la brevedad posible’’ y conocer de primera mano los avances de la investigación.

La Presidencia de la República consignó que en el mismo telefonema el presidente de Egipto reiteró ‘‘su más amplia disposición de apoyar a que la misión mexicana cumpla con su cometido’’, así como las instrucciones giradas para la adecuada atención de los heridos, ‘‘y desde luego iniciar una investigación pormenorizada de los hechos que han llenado de luto tanto a México como a Egipto’’.

Finalmente, el presidente Enrique Peña Nieto reconoció a su homólogo de Egipto su involucramiento en la investigación de los hechos, ‘‘y le expresó también sus condolencias por los ciudadanos egipcios que perdieron la vida y fueron heridos en el mismo incidente’’.