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Gael García Bernal presentó Desierto en festival canadiense

Validando el discurso de odio hacia los migrantes es como empieza el genocidio
 
Periódico La Jornada
Jueves 17 de septiembre de 2015, p. a10

Toronto.

Desierto, la película de suspenso sobre migración, usa una apasionante acción para enviar un duro mensaje sobre la acalorada retórica que siembra las semillas de la violencia, pero la estrella del filme, el mexicano Gael García Bernal, no tiene problemas para ponerlo en palabras.

El principal problema ahora mismo con ese tema es que lo vemos como un problema. No lo es, afirmó el actor, quien tuvo dificultades con su visa para asistir al Festival de Cine de Toronto para el estreno de la película.

La migración es algo que ha ocurrido desde el comienzo de la humanidad, agregó.

La mayor crisis desde la Segunda Guerra Mundial

Europa está intentando lidiar con la mayor crisis de migrantes y refugiados desde la Segunda Guerra Mundial en medio de estremecedoras imágenes de niños ahogados y el crecimiento de populistas antinmigración.

En tanto, en Estados Unidos el precandidato presidencial Donald Trump propuso deportaciones masivas y un muro para frenar el flujo de personas que cruzan la frontera sur del país.

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Jonas Cuarón y Gael García en el certamen de TorontoFoto Reuters

Hay un discurso de odio, precisó García Bernal sobre los debates relacionados con la seguridad fronteriza y la persecución de los trabajadores indocumentados.

En Desierto, en su papel de Moisés enfrenta la personificación de ese odio en el peligroso vigilante Sam, interpretado por Jeffrey Dean Morgan, quien reduce a un número de personas que intentan cruzar la frontera con ayuda de un rifle de largo alcance y un perro feroz.

Esto es lo que sucede cuando alguien valida esa conversación, ese discurso, dijo García Bernal. Así es como comienza un genocidio, así es como empieza una guerra civil: validando ese discurso ignorante, repulsivo, intolerante, agregó.

El director Jonás Cuarón dijo que evitó darle a Moisés, Sam y a los otros viajantes un pasado, para enfocar la atención en el peligroso trayecto a través de inolvidables paisajes.

El desierto no tiene los prejuicios de nosotros. Para él todos son iguales, dijo el cineasta, hijo del galardonado director Alfonso Cuarón.