Guadalajara, Jal.

La verdad, ya perdí la capacidad de asombro de lo que sucede en Chivas, dijo el delantero Omar Bravo sobre la salida del técnico José Manuel de la Torre, del hermano de éste, el ex presidente Néstor de la Torre, y la llegada del entrenador argentino Matías Almeyda.

Bravo, uno de los referentes del conjunto rojiblanco, admitió que los jugadores intercedieron ante Jorge Vergara, dueño del equipo, por la permanencia del Chepo: Es cierto. Es difícil esconder ese tipo de situaciones con todas las redes sociales que hay.

Sin embargo, en tono molesto agregó: Hay alguien que paga y decide, que es el dueño. Es determinación de él; nosotros agotamos hasta el límite las posibilidades porque no pasara esta situación, pues es un golpe anímico. Empezar de cero otro sistema ha sido difícil, pero hay que acatar las decisiones y seguir trabajando.

Admitió que el equipo está afectado, lo que se reflejó en la reciente derrota 0-1 ante Morelia. “El plantel está vacío, careció de alma, de punch. Todavía no nos recuperamos de la salida del Chepo, pero hay que ser profesionales. Somos jugadores, lo demás pregúntenle al dueño”.

Bravo agregó que no conocen al nuevo estratega: No sabemos nada, hay que esperar en el club a ver qué se nos presenta. Nosotros hacemos futbol, estamos en la cancha y lo demás ya les dije.

Por su parte, Almeyda entrenó al equipo por primera vez ayer por la tarde en las instalaciones de Verde Valle.

Las actividades fueron restringidas. No hubo acceso a los aficionados ni a medios de comunicación, mientras que al mediodía el auxiliar Ramón Morales salió del club con dos bolsas grandes. Se le vio molesto y no dio declaraciones, por lo que se dio por un hecho su salida.