Al participar en las audiencias públicas sobre la participación de México en el 70 periodo ordinario de sesiones de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el embajador Jorge Eduardo Navarrete destacó que ‘‘el problema en Siria no es de una crisis migratoria, sino asilo humanitario o refugio’’.

El ex representante permanente de México ante la ONU, destacó ayer en el Senado que se debe aclarar esta situación, ‘‘porque hay un elemento que es crucial en la información internacional sobre esta crisis: no es migratoria y se han confundido los términos: migratoria y asilo o refugio. La crisis en Siria demanda respuestas inmediatas y de carácter temporal o de mediano plazo’’.

Navarrete precisó: ‘‘Las corrientes migratorias son personas que buscan establecer y desarrollar su vida en otros países por falta de oportunidades en sus naciones, pero esas situaciones no pueden manejarse como casos de asilo o de protección humanitaria. Ahí, confluyen intereses de países expulsores y receptores, porque estos últimos son naciones cuya población envejece y requerirán fuerza de trabajo de otras latitudes’’.