Madrid.

El Tribunal Constitucional de España admitió el recurso presentado por el gobierno español, del derechista Mariano Rajoy, para suspender de forma cautelar la ley de la Agencia Tributaria de Cataluña y la legislación que regula el sector audiovisual e Internet.

La vicepresidenta del gobierno catalán, Neus Manté, lamentó la constante asfixia y recentralización que impone el Partido Popular.

La decisión se conoció a dos semanas de las elecciones autonómicas más tensas y complejas en la historia reciente de Cataluña, que por primera vez desde la restauración de la democracia aspira a seguir la hoja de ruta marcada por su mandatario, Artur Mas, para promulgar una declaración unilateral de independencia.

El Tribunal Constitucional suspendió cautelarmente la ley de la Agencia Tributaria de Cataluña, reformada recientemente por el gobierno de Mas para impulsar una Hacienda propia en la región, y abría la puerta a los funcionarios del Estado español a integrarse en cuerpos de la administración catalana, clave en su desafío soberanista.

El gobierno de Mas vio en la suspensión una clara voluntad recentralizadora y de asfixia del Ejecutivo español, dijo en rueda de prensa Neus Munté, la número dos del Ejecutivo.

La decisión del Constitucional supone la paralización de la ley durante cinco meses, mientras se resuelve el fondo del asunto. El alto tribunal admitió también a trámite otro recurso del Ejecutivo español contra la ley catalana que impone un impuesto a las comunicaciones electrónicas y que quedó suspendida de forma cautelar, refirió Dpa.

El gobierno de Rajoy, que rechaza una posible salida de Cataluña de España, ha recurrido ante el Constitucional en los últimos meses algunas de las decisiones más importantes del jefe del Ejecutivo catalán para iniciar un proceso hacia la independencia de la región española.

Rajoy advirtió: nadie del gobierno aceptará que se liquide la unidad nacional, que se rompa la unidad de España, y tenemos mecanismos para ello. Sobre las exigencias soberanistas dijo en entrevista: no es mi culpa que haya más independentistas.