Martes 1º de septiembre de 2015, p. a15
Bristol. El mariscal de campo Tom Brady y la NFL fracasaron en llegar a un acuerdo por la suspensión de cuatro partidos impuesta al estelar de Patriotas de Nueva Inglaterra, situación que forzará al juez Richard Berman a tomar una decisión legal antes del viernes
en torno al deflategate, tras la tercera audiencia realizada ayer en la corte de Nueva York. Berman instó a ambas partes a acordar fuera de la corte, señalando en reiteradas ocasiones su escepticismo en la investigación de Ted Wells por el uso de balones desinflados de los Patriotas en la final de la Conferencia Americana, documento que usó la NFL para el castigo a Brady. La defensa del mariscal insistió a lo largo del proceso que existían contradicciones en la forma que se interpretaron los hallazgos de Wells, mientras los representantes de la liga se apegaron al argumento de que el comisionado Roger Goodell tiene la autonomía para castigar, sujeto a su juicio, con base en el acuerdo colectivo de trabajo entre la organización y los jugadores.