Lunes 31 de agosto de 2015, p. 33
En un tiradero de basura y cascajo, en la zona denominada El Oasis, se levanta el nuevo plantel de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), que permitirá a alrededor de 500 jóvenes continuar sus estudios.
Félix Medina Padilla, jefe delegacional de Magdalena Contreras, destacó que tras varias décadas de lucha, se contará con la primera institución pública de nivel superior en la demarcación, una de las demandas más sentidas de la población, seguida de espacios recreativos y culturales.
Con el Gobierno del Distrito Federal se realizan las gestiones necesarias para transmitir el inmueble de su propiedad a la universidad, mediante un permiso administrativo temporal revocable por 20 años o una cesión de dominio.
El funcionario explicó en entrevista que el Consejo Universitario de la UACM aceptó el ofrecimiento del terreno y el edificio que hizo la delegación, y se comprometió a iniciar las gestiones para instaurar su programa académico en el plazo requerido por sus procesos administrativos, escolares y presupuestales.
La rectoría y su consejo enviaron los convenios, que fueron compartidos con el gobierno capitalino, para cerrar el tema esta semana y tener una reunión formal con el rector, Hugo Aboites, para entregar el inmueble en la primera quincena de septiembre, estimó.
Con una inversión de 20 millones de pesos, se sacaron cientos de metros cúbicos de cascajo y basura, se construyó un edificio con seis salones y un área administrativa, que pueden utilizarse de inmediato, y se hizo el desplante del otro edificio, listo para levantar sus muros, al contarse con el proyecto ejecutivo
.
De considerarlo, dijo, las clases podrían iniciarse de manera inmediata o bien talleres, conferencias o cursos de inducción; mientras, le apoyamos ante la Secretaría de Finanzas para que cuente con recursos para el pago de la plantilla académica, administrativa y de apoyo.
No tenemos que darle recursos para la construcción, porque no los tenemos, pero no podemos dejar de lado que hay gastos de operación
, y que edificar un segundo edificio tendría un costo menor al invertido por esta administración delegacional, indicó.
Su concreción, consideró, daría la oportunidad a mil jóvenes de continuar sus estudios universitarios y salir de la violencia, pues Magdalena Contreras tiene una tasa alta de suicidios entre niños y jóvenes, principalmente por falta de educación.
Tan sólo este año suman nueve y no queremos que crezca la cifra. Padres, amigos y familiares, y la propia investigación que se lleva del caso arroja que esto se relaciona con temas emocionales, de acceso a la universidad y preparatoria, y problemas por encontrar un empleo
, comentó.