El objetivo es quitar barreras y agilizar procesos
: Censida
Pretenden acercarse a las metas fijadas por la Organización Mundial de la Salud
Domingo 16 de agosto de 2015, p. 30
Con el propósito de quitar barreras y agilizar procesos
para elevar la detección de VIH/sida en las poblaciones con mayor riesgo de contagio, se está actualizando la norma oficial mexicana (NOM) 010, informó Patricia Uribe Zúñiga, directora general del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/sida (Censida), organismo dependiente de la Secretaría de Salud (Ssa).
En entrevista, la funcionaria comentó que la la expectativa es que en 2016 se haya concluido la revisión de dicha NOM para aumentar el porcentaje de personas de las poblaciones claves
, sobre todo en hombres que tienen sexo con otros hombres, pues es en ese segmento donde ocurren la mayor cantidad de nuevas infecciones.
No obstante, en ese grupo de población sólo 43 por ciento
se realiza una prueba de detección de VIH/sida cada seis meses, indicó Uribe Zúñiga, quien agregó que los esfuerzos serán suficientes cuando se realicen la prueba 90 por ciento de las personas pertenecientes a estos sectores.
Estamos mejorando los esfuerzos, y sí se están haciendo cosas positivas a nivel federal y estatal (para aumentar la detección en poblaciones clave). Se está actualizando la NOM Ssa 2-010, y a más tardar el año que entra va a salir la versión actualizada. Estamos actualizando, fundamentalmente, la parte que tiene que ver con agilizar los procesos y quitar barreras, para que la prueba de detección se pueda ofrecer de manera más sencilla. Ya se hicieron las consultas, ya prácticamente se tiene el primer borrador y se va a presentar en breve al Comité Nacional de Normalización.
Expuso que el personal operativo sanitario señaló a las autoridades que era muy complicado
realizar el análisis, porque el proceso tardaba más de 40 minutos
debido a que éstos debían primero ofrecer una consejería para luego pedir un consentimiento firmado, y todo ese proceso quitaba mucho tiempo, lo cual incidía en la posibilidad de que los abordados desistieran.
Uribe Zúñiga destacó que la última encuesta nacional de salud arrojó que la prevalencia en México en el sector de hombres que tienen sexo con hombres está entre 12 y 17 por ciento, la cual es muy parecida a la de América Latina, y hay países que tienen de 15 a 20 por ciento, pero sí, tenemos que promover la detección en hombres que tienen sexo con otros hombres
, así como en trabajadores sexuales, usuarios de drogas inyectables y mujeres transexuales
.
Comentó que para hacer campañas de prevención y detección en estas poblaciones no funcionan las campañas masivas, sino las comunitarias
, y reconoció que para tener mayor efectividad en la reducción de contagios entre los sectores de riesgo se deben hacer también cambios estructurales
, entre ellos legislativos
y de reducción del estigma
hacia estas personas.
En este último rubro, aseguró que se han intensificado las acciones gubernamentales, tanto a nivel federal, como estatal. Estamos capacitando al personal de primer nivel
y apoyamos otros proyectos de sensibilización
. La intención –remarcó– es quitar el estigma a la prueba
.
Tras señalar que en los servicios especializados de VIH, no existen problemas de discriminación de pacientes, manifestó que los contratiempos ocurren cuando requieres canalizarlos a otros servicios, es trabajo de mucho tiempo, es cambiar una cultura; por eso trabajamos en coordinación con el Conapred, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, la Sedesol y el Inmujeres. Estamos uniendo fuerzas para hacer estrategias conjuntas
.
Comentó que la meta internacional que estableció la Organización Mundial de la Salud (OMS) es que haya un diagnóstico de 90 por ciento de las personas que viven con VIH/sida; que a 90 por ciento de los contagiados se les dé tratamiento, y que a 90 por ciento de los infectados se les lleve a tener una carga indetectable del virus.
Remarcó que en general en el país las nuevas infecciones por año de VIH/sida disminuyeron 38 por ciento
de 2005-2006 a la fecha y la epidemia tiene una prevalencia baja
pues se ubica en 0.24 en la población de 15 a 49 años de edad.