Crisis en foros pequeños
The Mob
Sones tradicionales
omo asidua asistente a actuaciones nocturnas en la ciudad de México, y cosechando diálogos entre músicos, cronistas y público animoso, quien escribe ha observado la baja afluencia que hoy día cunde entre los conciertos de rock hecho en México, fuera de los grandes festivales. Pareciera que los conciertos en clubes y foros breves hubieran dejado de ser atractivos, sobre todo para los más jóvenes. Esto ha puesto en jaque no sólo a los músicos locales, sino a los foros y a la escena toda. El asunto es más complejo, pero por ahora, una aproximación, algunas hipótesis, de acuerdo también con la experiencia de años antes citada.
Una de las razones por las que la fascinación por ver a una banda en vivo ha disminuido es porque hace tiempo que es posible verlas en video por Internet. Ya no hay misterio ni sorpresa. Podemos saber perfectamente cómo suenan, sin ensuciarnos los zapatos. Las relaciones humanas que suelen vivirse en esos pequeños conciertos –y el gasto que ello implica– son relegadas a otro tipo de bares donde no se cobra la entrada y se puede dialogar o bailar. Asimismo, la precariedad económica, que va en aumento en México, no es razón menor; si se quiere uno divertir preferirá invertir en tragos que en pagarle a un artista por verlo. La sensación de que las bandas mexicanas viven aquí y otro día los puedo ver
también es determinante, a diferencia de la expectativa que genera un grupo extranjero, que no visita los foros locales con frecuencia.
Otra causa importante es la proliferación de festivales, tanto masivos como modestos: el público prefiere pagar por ver a más de dos o tres bandas, pero sobre todo, elige pagar conceptos con nombres interesantes, experiencias donde el envoltorio, el discurso, las disciplinas diversas en torno a la música, así como la interacción varia, ya sea en persona o en redes sociales, tengan más peso que la música en sí misma. Así, hay proyectos exitosos como el Bahidorá, por poner un ejemplo, donde lo importante es el entorno natural (entre ríos, clima cálido, pastos para acampar, talleres sobre temas afines al medio ambiente y la sana alimentación, etcétera), aunque los artistas (en su mayoría foráneos) sean poco conocidos: de hecho, el que sean relativamente desconocidos, en conceptos como éste, es un punto de venta de peso: transmite exclusividad o el hecho de ser especial
, rasgo atractivo para el veinteañero cuya vida gira en torno de la información que está en las redes.
Si bien se trata de un cambio de estafeta generacional singular dentro de la industria de conciertos en México, no deja de conllevar desventajas para los creadores que no integran bandas de festivales
. Una vez más, el reto de los espacios redituables para músicos de calidad o no masivos
sigue siendo un tema pendiente y sin respuestas concretas, ya sea desde las instancias públicas o las privadas. A seguir dando batalla.
Resorte, Chris Mitchell, Petra y Mono
Viernes 14. 1. Anarco-punk enfermo con The Mob (Inglaterra; 1979 a 1983 y 2011 a la fecha). De España: Juanita y los Feos. De México: Muerte, Cremalleras y Último Imperio. Bahía (Tolsá 36, Juárez). 20 horas, $150. 2. La productora Cuatro Cuartos cumple 13 años de ofrecer festines lejanos al cliché, con el veterano productor y Dj estadunidense Chris Mitchell, quien promete una noche llena de referencias al house de Chicago con toques futuristas, tanto techno como industriales. También: White Visitation, Dj Oyster y Phonyfake. Mancera (Venustiano Carranza 49, Centro). 21 horas, $150. 3. Resorte, un clásico del hardcore-rap mexicano de los 90, hará estallar cabezas. Caradura (Nuevo León 73, Condesa). 22 horas, $150. 4. Petra: talento mexicano que une ascendencias gitanas, turcas, árabes e hindúes. Zinco Jazz Club (Motolinia 5, Centro). 21 horas, $200. 5. El lugar más chic para el electro-encuentro after-hour, es el Mono. Hoy: Jaen Paniagua y Gabriel I. Versalles 64, Juárez. Medianoche en adelante. Ellos: $250, ellas no pagan.
Bomba Estéreo, Victorios, DFX y Timo Maas
Sábado 15. 1. De Colombia, la electro-funk-cumbia-champeta de Bomba Estéreo. El Plaza (Juan Escutia 4, Condesa). 20 horas, $255 a $537. 2. DFX. Rica noche para encender pista con el productor inglés de electropop y euro-house Totally Enormous Extinct Dinasours (Orlando Higginbottom), en Dj-set. También: Shlohmo (Estados Unidos), Christian Löffler (Alemania) y Lao (México). Sala (Puebla 186, Roma). 22 horas, $300. 3. House-tech de antaño con el Dj alemán Timo Maas. De acá: Flavio Navarro y Leo Figuer. Rioma (Insurgentes 377, Condesa). 23 horas, $300.
Domingo 16. 1. Música tradicional mexicana: Malinali, Dos Raíces (afro-mex), Los Vega (son jarocho), Estampa Huasteca (son huasteco), El Bandeño (chilenas de Guerrero), Altepee (música de cuerdas) y Mixanteña de Santa Cecilia (son de Guerrero). Centro de Tlalpan, 12 a 19 horas, acceso libre. 2. A raspar suelo con el ska-swing de Los Victorios, Melodycans e Intermedio. Caradura (Nuevo León 73, Condesa). 22 horas, $150 (más)
Twitter: patipenaloza