De un acto político que daña a nadadores, a sus familias, al deporte y a la imagen de México calificó Kiril Todorov, presidente de la Federación Mexicana de Natación, la acusación que lanzó el Comité Olímpico Mexicano, de haber inscrito a nadadores con marcas alteradas en los Campeonatos Mundiales de Natación de Kazán.

No tengo ni la más mínima duda de que la manipulación tendenciosa de esta información que ha generado toda esta polémica tiene fines exclusivamente políticos, personales y mezquinos, dijo el directivo en extensa conferencia de prensa tras la amenaza del COM de sanciones a nadadores que podrían quedarse sin asistir a Río 2016.

Sin dar nombres, pues no es mi estilo difamar, Todorov aseguró conocer el origen de esa información publicada en una página web que sistemáticamente ataca a la FINA.

Asintió cuando se mencionó al ex nadador Juan Manuel Rotter y al ex clavadista Jesús Mena de estar detrás de esas acusaciones sin fundamento, que además descontextualizó el COM, el cual, recalcó, no tiene ninguna injerencia en un Mundial de natación.

“Es un grupo de gente que después de seis años no se resigna a que no ha ganado la FMN y que tuvo un paso efímero y lamentable por el deporte en los años recientes.

Lo que busca es el desprestigio de la natación a nivel nacional e internacional, sostuvo, en alusión a Rotter, quien en 2009 perdió la contienda por la federación, y a Mena, que al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte no hizo nada, no peleó para defender el Mundial de 2017, cancelado para Guadalajara, con una multa de 9 millones de dólares.

No sé si el tema de fondo sea ese. Este grupo lo que buscaba no solamente era el manejo de la FMN sino el del Campeonato Mundial de Natación. Como hemos sido cuidadosos desde 2006, eso ha incomodado a mucha gente, anotó el federativo.

El también vicepresidente técnico de natación en la FINA lamentó que Carlos Padilla, titular del COM, no lo haya contactado, incluso hasta ayer, antes de lanzar una amenaza sin ningún fundamento.

Rechazó cualquier posibilidad de sanción de la FINA por la inscripción de 13 nadadores en 34 pruebas con tiempos por debajo de los que ostentaban.

Aseguró que ni siquiera era necesario que el director ejecutivo del organismo, el rumano Cornel Marculescu, lo respaldara, como lo hizo vía telefónica, pues se trata de un acuerdo previo a partir del nuevo sistema GMS (General Managment System), al que había que ingresar con tiempos por debajo de los tope establecidos para la justa, a la que la FINA, con 204 países afiliados, pretende incentivar la participación en la natación, según el nuevo sistema que pretende la masificación de la disciplina acuática.