La mayoría de las víctimas de trata de personas en México y el mundo son mujeres –principalmente niñas y adolescentes– y migrantes, indicó el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.

Al inaugurar el Encuentro regional contra la trata de personas: Retos y avances, el ombudsman señaló que este fenómeno delictivo debe ser atendido desde un enfoque de derechos humanos y no sólo con los métodos de represión y persecución empleados por las fuerzas de seguridad.

Más que combatir y reprimir este delito con las fuerzas del Estado se debe atender el fenómeno sobre la base de un enfoque de derechos humanos, perspectiva con la que nos identificamos, pues permite reconocer, sin dejar de perseguir el delito, que esta forma de transgresión se encuentra ligada directamente a la discriminación y a la inequidad.

El encuentro se realizó en el contexto del Día Mundial contra la Trata de Personas (se conmemora el 30 de julio). Ahí se informó que es el tercer delito más lucrativo en el mundo, con una ganancia anual de entre 32 mil y 36 mil millones de dólares. Datos de la Organización Internacional del Trabajo estiman que en el mundo 14.2 millones de personas son víctimas de explotación laboral y 4.5 millones de explotación sexual.

González Pérez aseveró que en la CNDH se apuesta esencialmente a la puesta en marcha de estrategias dirigidas a combatir la oferta y la demanda, así como a modificar patrones culturales abusivos y misóginos. Lo anterior mediante programas de intervención sociológica y educativa para la construcción de identidad de género, basada en valores de respeto e igualdad esencial de las personas para disminuir relaciones asimétricas entre géneros.

Indicó que en la mayoría de los casos el crimen organizado es el responsable de estas acciones.