Madrid.

Cristina de Borbón, hermana del rey Felipe VI, sólo tendrá que pagar 449 mil euros de fianza y no los 2 millones 700 mil que solicitó el juez instructor, tras una polémica resolución de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca. La justicia la investiga como cooperadora necesaria en una trama de corrupción dirigida por su marido, el deportista Iñaki Urdangarin, acusado de varios delitos fiscales.

Cristina vive desde hace más de un año en Suiza, desde donde sigue, por medio de sus abogados, la investigación y el proceso judicial abierto contra ella, su marido y el socio de ambos, Diego Torres, ex profesor de la escuela de negocios de Urdangarin y quien habría sido el autor intelectual de la trama de corrupción que les permitió desfalcar al erario más de 13 millones de euros.

Gracias a sus relaciones públicas con diversos funcionarios de Madrid, Valencia, islas Baleares, Castilla y León y Murcia, Urdangarin se ofreció como consultor para diversos proyectos tanto deportivos como supuestamente filantrópicos, que en algunos casos ni siquiera se llevaban a cabo pero sí costaban cantidades importantes de dinero al erario. Por ejemplo está un falso plan de ayuda humanitaria para paliar la desnutrición infantil en Nicaragua, que costó más de 2 millones de euros al gobierno valenciano y nunca se llevó a cabo.

A pesar del criterio del fiscal, Pedro Horrach, el juez instructor José Castro decidió imputar a la hermana del monarca dos delitos fiscales como cooperadora, por lo que fijó una fianza de 2 millones 690 mil euros.

La defensa de Cristina de Borbón ya había depositado en los juzgados un cheque por 587 mil euros que, según el escrito del fiscal, sería la cantidad máxima que tendría que pagar de multa por la responsabilidad civil en los delitos fiscales imputados.

Ante la fianza impuesta por el juez, la defensa de la acusada decidió presentar un recurso de apelación, en el que calificó de desproporcionada la cantidad y solicitó al tribunal una reducción y que tomara en cuenta que ya se había depositado el dinero.

La Sala de la Audiencia acordó así rebajar la fianza, al sostener que no deben exigirse fianzas desproporcionadas.

Cristina de Borbón es la única de los principales imputados del llamado caso Nóos que no está acusada de los ocho delitos por los que se persigue al resto, por los que podrían recibir penas hasta de 20 años de cárcel, incluido su marido, así como multas superiores a los 5 millones de euros. A Urdangarin se le acusa de malversación, fraude fiscal, tráfico de influencias, estafa y blanqueo y el fiscal pide para él 19 años y seis meses de prisión, y una multa de 3 millones 500 mil euros.