En las casas de cambio del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) el dólar se vendió a 16.39 pesos y se compró a 15.44 en promedio de ambos. En el transcurso del día la moneda mexicana se fue recuperando, ya que la divisa estadunidense llegó a 15.68 y se compró hasta en 15.30 pesos.

Por otro lado, luego de seis años el aeropuerto capitalino retiró por tiempo indefinido las mamparas antirrobo de las casas de cambio de las terminales 1 y 2 que estaban instaladas en pasillos, a una distancia de metro y medio del ingreso de los locales.

Arrendatarios comentaron que la limpieza comenzó el fin de semana y concluyó el lunes, aunque al realizar un recorrido se observaron algunas. Lo que pretenden las autoridades es ocultar la devaluación tan terrible que está teniendo el peso y emplean estas medidas para tratar de engañar a la gente.

Hace unas semanas, La Jornada publicó que las autoridades del aeropuerto capitalino ordenaron quitar anuncios de los establecimientos, como el nombre comercial o razón social, etiquetas y adornos, así como los diferentes tipos de cambios que tenían instalados en los paneles, a fin de homologar la imagen de la terminal aérea.

Mediante la circular DGACS/ SSC/0003/2015 firmada por el subdirector de servicios comerciales, Sergio Estrada Arteaga, de la cual La Jornada tiene copia, el aeropuerto dio plazo hasta el martes 7 de julio para quitar los carteles, para que al día siguiente la imagen corporativa se viera homologada. Ahora, casi tres semanas después, la disposición fue desmontarlas.

Los usuarios sólo podrán consultar las cotizaciones que se localizan en los costados de los establecimientos.

Las estructuras de metal de acero y vidrio esmerilado se instalaron en 2009 como medida de seguridad, a fin de evitar robos a turistas nacionales y extranjeros que cambian moneda.

Los paneles dificultaban la visibilidad a otras personas para que no pudieran observar a los usuarios que realizaban operaciones en los centros cambiarios.

La recomendación de colocar las mamparas se dio desde la formulación del programa Protejamos Nuestro Aeropuerto, que comenzó en marzo de 2009, luego que en enero de ese año el científico francés Christopher Augur, quien había cambiado divisas, fue asaltado y asesinado en las inmediaciones de la terminal, así como por las denuncias presentadas en su momento por usuarios de los centros cambiarios.