El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Juan Pablo Castañón, dijo que el sector empresarial exigirá a la próxima legislatura colocar el combate a la corrupción como prioridad en la agenda nacional, acelerar la instrumentación del Sistema Nacional Anticorrupción, que en el Senado se dé preferencia al nombramiento del fiscal especializado en el combate a ese fenómeno y que se integre el comité coordinador de dicho sistema.

Destacó que, para la Coparmex, el principal factor que puede limitar el crecimiento económico de México es la ausencia del estado de derecho y la inseguridad. Retomó datos de la más reciente Encuesta Nacional de Victimización de la Empresa, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en la cual se estima que el costo total de la inseguridad y el delito para las unidades económicas representó 110 mil millones de pesos, lo que significa 0.66 por ciento del producto interno bruto.

Se estima que cada unidad económica gastó 55 mil 738 pesos en promedio en medidas de protección a consecuencia de los delitos. Ello continúa siendo un gran costo para la productividad y el desarrollo económico; ahí es donde tenemos el reto, subrayó.

En su mensaje semanal, Juan Pablo Castañón destacó que sólo se denuncian 15.3 por ciento de delitos, porque los ciudadanos consideran que hacerlo es una pérdida de tiempo y hay desconfianza hacia las autoridades.

Los mexicanos no queremos seguir observando los altos índices delictivos ni la corrupción ni la impunidad como si fueran algo normal en nuestra cultura. Queremos un combate efectivo a esos flagelos para que se restaure la confianza en las autoridades, se fortalezcan nuestras instituciones y la confianza en nuestro sistema de impartición de justicia.

Advirtió que para lograr mayor desarrollo y niveles de bienestar es impostergable asegurar total certidumbre a las inversiones nacional y extranjera, y la generación de empleos y oportunidades, para que tengan las mejores condiciones para crear trabajos formales, crecimiento y desarrollo.

Necesitamos acelerar el crecimiento económico, pero no para crecer de cualquier manera ni bajo la suspicacia de prácticas de corrupción. Tampoco de influyentismo, privilegios y miedo de las personas, puntualizó el dirigente patronal.