Toronto.

El equipo femenil mexicano de sable fue apaleado 45-31 en la final por el representativo de Estados Unidos y se quedó con la medalla de plata en esa especialidad de los Juegos Panamericanos, mientras Venezuela venció a Cuba 45-38 en el duelo por el bronce.

Las sablistas estadunidenses no dieron oportunidad a las mexicanas y desde el primer combate manifestaron su superioridad, cuando Mariel Zagunis, campeona en individuales en Guadalajara 2011, despachó 5-2 a Úrsula González, lo cual marcó el rumbo de la confrontación.

Maria Pliego y Julieta Toledo dieron un poco más de pelea ante Ibtihaj Muhammad y Dagmara Wozniak, pero fueron incapaces de arrancar por lo menos una victoria y ambos duelos terminaron con idéntico marcador 5-4.

El resto de los combates tuvieron marcadores similares, con las estadunidenses adjudicándose cada uno, excepto el penúltimo, en el que González venció 6-5 a Wozniak, quien alcanzo los 45 puntos necesarios para ganar la medalla de oro.

De esta forma, estadunidenses, mexicanas y venezolanas repitieron el podio de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011.

Por otro lado, la jefatura de la delegación mexicana informó en un comunicado que por un error de la Federación Mexicana de Esgrima y la falta de logística de ese órgano, no se pudo inscribir a Úrsula González en la prueba de sable individual, por lo que la medallista de plata no pudo participar en la prueba.

En un comunicado agrega que “el pasado domingo 19 de julio, a las 19 horas se llevó a cabo la reunión técnica de dicha disciplina sin que se presentará el delegado para corregir la inscripción mal hecha por parte de la federación, desde un inicio ante la dirección técnica del Comité Olímpico Mexicano, la cual se presentó otro día, pero ya no pudo hacerse la rectificación pertinente, pese a lo cual el presidente de la Federación Mexicana de Esgrima, Jorge Castro Rea, no asume su responsabilidad y descarga la culpabilidad en el Comité Olímpico Mexicano.

Por su lado, los representantes varones quedaron fuera de los metales al ser vencidos, primero por Venezuela 45-34; luego respiraron al dar cuenta 45-44 de Colombia, pero en el tercer combate volvieron a caer 45-38 ante Brasil.

Momentos después, en Oshawa, el boxeador mexicano Lindolfo Delgado no tuvo problemas para vencer 3-0 al puertorriqueño José Rosario y accedió a la final de peso ligero para disputar este sábado la medalla de oro.

Delgado fue mejor que su oponente los tres capítulos de la pelea que se disputó en el Sports Centre, para imponerse por doble 30-27 y 30-26, para asegurar la plata en el certamen.

Durante los nueve minutos del combate hubo pocos golpes, los mejores conectados por Lindolfo, quien llegó a este duelo tras dos victorias de 3-0, lo que aprovechó sobre un oponente que apenas ayer debutó en la justa.

Lindolfo enfrentará en la final el cubano Lázaro Álvarez, quien superó al guatemalteco Kevin Luna Muñoz, y buscará su segundo metal dorado en la justa, tras el obtenido en Guadalajara 2011, pero en los 56 kilogramos.

Después, en una pelea complicada para el mexicano Rogelio Romero, quedó marginado de la final en semipesados tras caer 3-0 ante el venezolano Albert Ramírez, con lo que se quedó con la presea de bronce.