A la tribuna de la Permanente llegó ayer el debate sobre el reciente proceso electoral en Chiapas. Por un lado se señaló la intervención directa del gobernador Manuel Velasco Coello para beneficiar al Partido Verde Ecologista de México (PVEM), a lo que militantes de este instituto y del Partido Revolucionario Institucional (PRI) respondieron que los comicios fueron transparentes.

El senador Luis Armando Melgar, del PVEM, aseveró que la elección estuvo dentro de la normalidad democrática, pero el perredista Zoé Robledo lo puso en entredicho: No es normal que en un solo municipio, Suchiate, el padrón haya crecido al doble de la media nacional. Asimismo acusó al gobernador de haberse convertido en coordinador de campaña del PVEM.

El diputado panista Juan Pablo Adame llamó a la autoridad a hacer respetar el voto y aseguró que el recuento de la elección en Tuxtla Gutiérrez dará la victoria a su partido.

En San Lázaro, Arturo Escobar, coordinador de los diputados del PVEM, calificó de hipócrita la posición de los partidos Acción Naconal (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), que integraron un frente por la defensa del voto en Chiapas, pues la elección del domingo se desarrolló en igualdad de condiciones.

Sostuvo que si bien hubo algunos focos rojos, los reclamos del PAN sobre la contienda por la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez no tienen sustento, pues la votación está prácticamente empatada. La diferencia es de 500 votos y el Verde perdió Comitán. Salvo en el caso de la capital, el resto de los resultados es un espejo de las encuestas que conocimos antes de la elección, dijo.

La víspera, en conferencia conjunta, PAN y PRD insistieron en que el gobierno estatal metió las manos en el proceso y afirmaron que en algunos municipios votaron todos los electores inscritos en el padrón.

Escobar atribuyó las críticas de esos partidos a los resultados escandalosamente malos que obtuvieron y dijo que en la entidad tienen en promedio 6 por ciento de la votación. Chiapas sufrió 12 años de gobiernos del PRD, y el PAN, si se separa la votación que obtuvo en Tuxtla Gutiérrez, no existe, afirmó.

Antes de la elección el Verde fue obligado a sustituir candidatos para cumplir la paridad de género. No obstante, Escobar argumentó que ningún partido cubrió por completo ese requisito porque en muchos municipios regidos por usos y costumbres el género masculino se impone.

Cuando se le preguntó por qué el PVEM registró a las esposas de los candidatos para cumplir la orden de la autoridad electoral, indicó que fue porque sólo les dieron 48 horas.