Toronto.

El esfuerzo de María Guadalupe González tuvo su recompensa con la medalla de oro y récord panamericano en 20 kilómetros de marcha (1:29.24), porque nada más rebasó la meta se desvaneció por deshidratación y la llevaron al hospital, en horas de drama y tensión hasta que se recuperó. Luego, sonriente, subió al podio a recibir la presea y escuchar el Himno Nacional Mexicano, que no se tocaba en esta prueba femenil desde hace 12 años.

No estaba planeado que me desmayara, sino ganar, declaró la mexiquense, quien quería ser boxeadora y en sus inicios aborrecía la caminata. Superó por un minuto a la brasileña Erica de Sena y por casi tres a la ecuatoriana Paola Pérez.

El coraje que imprimió Lupita, como se le conoce en el medio de la marcha, lo demostró con el ritmo que impuso apenas tomó la salida, sin importarle las condiciones climáticas adversas para tomar la delantera, que jamás soltó hasta que llegó a la meta, y superar el registro de 1:32.28 de la guatemalteca Jamy Franco, impuesto en Guadalajara 2011, mientras la otra mexicana, Alejandra Ortega (1:35.03), concluyó en el octavo lugar.

El andar glorioso de la mexiquense hizo estragos en su físico, lo que fue evidente con el gesto de dolor en su rostro durante la penúltima vuelta del circuito a las orillas del lago de Ontario. Apenas rebasó la cinta de la victoria, la marchista fue asistida por los voluntarios, que la sacaron en brazos; una ambulancia ya la esperaba para llevarla a la policlínica de la Villa Panamericana.

Sufrió una deshidratación severa, explicó Antonio Lozano, presidente de la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo, quien informó que una vez que la campeona se recuperó lo primero que preguntó fue si había mejorado el récord panamericano.

El anterior triunfo mexicano había sido con Victoria Palacios en Santo Domingo 2003, heredera de la estafeta de Graciela Mendoza, quien junto con el profesor Juan Hernández comenzó a entrenar a la nueva monarca continental, que tan sólo en 2015 ha mejorado tres veces su marca personal.

Una lesión y su pegada nada fuerte truncaron sus sueños de ser boxeadora. Sin embargo, en su rehabilitación María Guadalupe recibió el consejo del médico que la atendió para dirigirla a la caminata, pero ese movimiento de cadera le generó burlas de sus compañeros en la escuela.

En el Tecnológico de Tlalnepantla cuando me veían me chiflaban porque entrenaba caminata, me daba pena, evocó la marchista de 26 años, que comenzó a los 13.

Ahora su mirada está en China, en el Mundial de Atletismo. Espero codearme con las jefas, como las rusas, chinas, españolas, y ver cómo está México. Que sea un paso para Juegos Olímpicos y ser el coco de estas marchistas a escala mundial, retó la nueva monarca panamericana.

Ésta es la primera medalla de oro de México en la caminata de mujeres en una cita panamericana desde que Victoria Palacios se impuso en Santo Domingo 2003.

En hombres, los mexicanos evidenciaron que continúan en declive con el cuarto lugar de Julio Salazar (1:25.11) y el séptimo de Éder Sánchez (1:28.16). La sorpresa fue Canadá, que hizo el 1-2 con Evan Dunfee (1:23.06) e Iñaki Gómez (1:24.25), seguidos del brasileño Caio Bonfim (1:24.43), mientras el guatemalteco Erick Barrondo, subcampeón olímpico y defensor del título, se despidió con una descalificación.