De 29 armadoras automotrices que hay en México, sólo dos tienen sindicatos independientes, todas las demás tienen gremios de protección y se impide a toda costa la libre organización de los obreros, denunciaron integrantes del Sindicato Independiente de Trabajadores de Honda, planta Jalisco, quienes cumplieron cinco años de sufrir represión, golpes, despidos injustificados, triquiñuelas legaloides, para impedirles que se lleve a cabo el recuento por la titularidad de su contrato colectivo.

En entrevista, advirtieron que ahora que están a la espera de que se determine la fecha del recuento, el Seguro Social les entregó un listado de trabajadores que está totalmente distorsionado, ya que en el mismo aparecen hasta funcionarios japoneses de la empresa, directivos, personas que ya fallecieron y algunos que dejaron de trabajar en la planta hace 10 años.

Pretenden meter casi 600 trabajadores chocolates en la lista de quienes tienen que participar en el recuento, lo que invalida totalmente el padrón, denunció el secretario general de este sindicato, José Luis Solorio, quien fue despedido y tiene una demanda de reinstalación a la empresa.

Explicó que tienen el compromiso del presidente de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA), Alberto Zorrilla, de que habrá un padrón confiable totalmente claro para el recuento. Sin embargo, temen que pudiera haber un madruguete y llamar de un momento a otro a un recuento que estaría falseado para favorecer a la empresa, pues ya es la tercera vez que se solicita al IMSS el padrón de trabajadores y primero lo negaba y ahora lo entrega falseado.

A los trabajadores de Honda de El Salto, Jalisco, les impusieron el Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Estructura, Armadoras, Motriz y la Industria, que dirige Carlos Arias, de la CTM. La empresa, en contubernio con diversas instancias gubernamentales, ha impedido a toda costa la libertad sindical y hasta les ha inventado acusaciones a los dirigentes.

Solorio y Luis Gerardo Rodríguez, secretario de finanzas, así como Esteban Acero, presidente de la comisión de honor y justicia del sindicato –ambos presentes en la entrevista y también despedidos injustificadamente–, señalaron que las empresas armadoras llegan a México y antes de que empiecen a operar ya pactaron con un sindicato de protección. Incluso la empresa BMW todavía no llega al país y ya compró por Internet su sindicato, dijeron.

La CTM es la que detenta la mayoría de los sindicatos del gremio. Mientras, las empresas hacen lo que quieren con los trabajadores: por ejemplo la Nissan Aguascalientes, en sus dos plantas en ese estado tiene sindicatos diferentes y paga salarios y prestaciones muy distintas. Lo mismo pasa con Honda Jalisco y Celaya: los contratos son abismalmente diferentes.