Campesinos de 43 municipios de Guerrero mantuvieron durante nueve horas un plantón frente a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), en demanda de la entrega de 450 millones de pesos correspondientes a diversos programas.

Venimos a presionar a las autoridades porque los recursos se los entregan a los agricultores ricos de Sinaloa, Sonora y Jalisco, mientras a nosotros sólo han dado los del Pimaf (programa de incentivos para maíz y frijol), asentaron los manifestantes, quienes durante seis horas mantuvieron cerradas las oficinas de la institución.

Los labriegos de 37 agrupaciones integradas al Congreso Agrario Permanente (CAP) de Guerrero llegaron por la mañana a bordo de 23 autobuses con los que bloquearon las calles aledañas a la Sagarpa, e impidieron durante varias horas el acceso y salida de empleados y visitantes.

Maclovio Avilés, dirigente estatal, expuso que permanecerían allí hasta lograr respuestas a sus demandas. Poco después del mediodía, luego de iniciar negociaciones con diversos funcionarios de la Sagarpa, solicitó a los manifestantes permitir el acceso al personal y desbloquear las calles.

Lo anterior, como muestra de buena voluntad para tratar los temas relacionados con ganadería, apoyo a mujeres, jóvenes y productores de maíz, frijol, aguacate, entre otros cultivos”.

Cerca de las seis de la tarde los campesinos se retiraron luego de que sus dirigentes informaron que habían logrado un avance de 60 por ciento en sus demandas y que el próximo lunes se reunirán nuevamente con funcionarios.

Voceros de la institución informaron que en la mesa de negociación presidida por el subsecretario de Desarrollo Rural, Juan Manuel Verdugo Rosas, se acordó avanzar en la integración de proyectos integrales de innovación y extensionismo rural, así como revisar solicitudes para el esquema de rehabilitación de praderas y repoblamiento ganadero.

Antes de retirarse, el coordinador del CAP, Humberto Serrano, y el líder guerrerense Maclovio Avilés reconocieron la voluntad política y la disposición de los funcionarios de Sagarpa para consolidar acuerdos.