DeLaurentis, jefe de la oficina de intereses en La Habana, será el encargado de negocios
Martes 7 de julio de 2015, p. 22
Washington.
El gobierno de Estados Unidos no planea modificar por ahora su política migratoria con Cuba, a pesar del anuncio del restablecimiento de las relaciones diplomáticas a partir del 20 de julio, informó ayer el Departamento de Estado, el cual explicó que Jeffrey DeLaurentis, jefe de la oficina de intereses de Estados Unidos en La Habana, será el encargado de negocios de su embajada en la capital cubana.
En este contexto, el relator especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos y las Sanciones Internacionales, Idriss Jazairy, pidió a Estados Unidos levantar el bloqueo impuesto a Cuba, y celebró la reanudación de los vínculos diplomáticos entre ambos países.
El levantamiento del embargo debe poner fin a su adverso impacto social, económico y humanitario causado por décadas al pueblo de Cuba, lo cual ha rechazado en múltiples resoluciones la Asamblea General de la ONU
, advirtió Jazairy.
La administración no tiene planes de alterar su política migratoria actual, incluyendo la Ley de Ajuste Cubano
, expresó la cancillería estadunidense en una nota.
La Ley de Ajuste Cubano (1961) es una herramienta de la guerra fría aún vigente, que otorga residencia a los cubanos después de un año de estancia en territorio estadunidense, sin importar cómo llegaron a Estados Unidos, incluso por la vía ilegal.
Mediante esa norma los migrantes cubanos, tengan o no visa, pueden conseguir empleo y obtener la residencia permanente en un año.
De acuerdo con su nota de este lunes, Estados Unidos apoya una migración segura, legal y ordenada
de Cuba y la completa implementación de los acuerdos migratorios
con ese país.
El embargo a Cuba está aún vigente y se requiere acción legislativa para levantarlo. Además, las reglas sobre viajes de ciudadanos estadunidenses a Cuba permanecen
, indicó el Departamento de Estado.
Recordó que se mantienen vigentes normas que apenas reconocen 12 categorías de autorizaciones para viajar a Cuba y que el Departamento del Tesoro continuará administrando las regulaciones para proporcionar licencias generales
para esos recorridos.
Los dos gobiernos anunciaron el miércoles pasado la decisión de restablecer sus nexos diplomáticos después de más de medio siglo de ruptura, así como la reapertura de sus embajadas a partir del próximo día 20.
Normalizar esas relaciones es un proceso largo y completo que requerirá interacción continua y diálogo entre los dos gobiernos, basados en el respeto mutuo. Habrá áreas de cooperación con los cubanos y continuaremos teniendo diferencias
, indicó el Departamento de Estado, y al referirse al nombramiento de DeLaurentis afirmó que la embajada permitirá a Estados Unidos promover más efectivamente sus intereses y valores, así como incrementar el compromiso con el pueblo cubano
.